Calle Nueva de Santiago de Jerez: de miembros de la nobleza, al más puro flamenco y de ahí, a la delincuencia...

Con el nombre de Nueva de Santiago aparece la calle Nueva ya en 1589 en la relación de censos de los hospitales, aunque también hay documentos que informan que antes llevaba el nombre de Sor Eulalia. El historiador jerezano Antonio Mariscal Trujillo recoge que a pesar de esta fecha, ya existía desde mucho antes, puesto "que en los padrones de Moneda forera de 1477, 1492, 1580, 85, 90 y 95, va siempre unida a la calle Cantarería. Si bien en los dos más antiguos figuran como los de Cueva y Cantarería".

"En 1477 vivían en ella varios fijosdalgos (miembro de la nobleza media de linaje, integrada por infanzones y caballeros), entre los que aparecen Pedro Ceballos, Juan de Bustos, Juan de Morales, Francisco García Palomino, Pedro Terán, entre otros", informa Mariscal.

La Calle Nueva ha estado desde hace más de un siglo estrechamente vinculada al flamenco de Jerez. De hecho, podemos hablar del corazón del barrio de Santiago, uno de los barrios flamencos de la ciudad. Dicho enclave, como también lo son Cantarería y la calle Merced, conforma el epicentro de este barrio señero, que ha dado voces gloriosas al cante flamenco.

En ella nacieron muchos de los grandes artistas de la historia, no hay que olvidar que Jerez ha sido la ciudad que ha dado el mayor número de intérpretes flamencos de la historia, tanto cualitativa como cuantitativamente.

El Guapo, Romerito, Niño Jero, Tío José de Paula, Manuel Sordera, Manuel Morao, Tío Borrico, El Serna, La Chicharrona o el mismísimo Rafael de Paula han sido algunos de las personalidades que llegaron al mundo en esta calle jerezana.

La calle Nueva ha sido también sede de una de las peñas flamencas con más enjundia de la ciudad, 'Los Juncales', un lugar por el que desfilaron no sólo la plana mayor de los artistas flamencos durante los años novena y principios del dos mil sino también personalidades de la cultura y la sociedad española de renombre.

Ahora, todo queda empañado por la ola de inseguridad y delincuencia. El último suceso, el tiroteo de este miércoles 15 de noviembre, vuelve a poner sobre la mesa la necesidad de una actuación integral para devolver a esta calle el prestigio que merece.