¿Cómo debe ser un buen calzado de montaña? Los expertos de La Valenciana Calzados nos lo explican

A la hora de realizar actividades de montaña, los expertos concuerdan en que lo fundamental es contar con un calzado apropiado plenamente adaptado a las características del terreno.

Las escapadas por la montaña pueden ser un suplicio si, tal y como afirman los profesionales, no se cuenta con un calzado a la altura, pudiendo provocar lesiones de diversa consideración en distintas partes del pie.

Para tener algo más claro en qué se debe fijar el consumidor a la hora de elegir su calzado de montaña, recurrimos a una de las firmas de referencia en el sector del calzado de montaña, especializado en la venta de calzado de montaña, trekking, trail running y botas de montaña, entre otros.

Aspectos primordiales a la hora de seleccionar el mejor calzado para la montaña

Aunque casi todo el calzado, al igual que ocurre con las prendas de ropa, se suele seleccionar en base a su diseño, lo primero que hay que tener en cuenta a la hora de escoger el calzado de montaña más apropiado es el nivel de protección que puede proporcionar.

“Los entornos montañosos pueden llegar a ser muy hostiles si tenemos en cuenta que estamos hablando de superficies escarpadas, repletas de irregularidades y desniveles que pueden poner a prueba las dotes físicas incluso del más aventurero”, señalan los expertos.

“Por eso, lo fundamental es cribar la selección de botas y zapatillas en base al nivel de protección que puedan proporcionar; si detectamos que un determinado tipo de calzado no es lo suficientemente resistente o robusto, quizá probablemente no sea el tipo de calzado más apropiado para una escapada por la montaña”, argumentan.

En base a su criterio, la punta de goma reforzada para proteger los dedos, las protecciones laterales y superiores para proteger el empeine y un refuerzo extra en el tobillo son algunos añadidos que debe presentar una buena zapatilla para trekking y otras actividades de montaña.

“La amortiguación y la estabilidad también son importantes y, de hecho, cuando hablamos de calzado de senderismo, estamos hablando de un tipo de zapatilla o bota que está diseñada para darnos la máxima estabilidad posible, dadas las irregulares características del terreno”, comentan.

Un elemento clave implicado en un aumento del nivel de estabilidad es la suela, que será más rígida en tanto en cuanto el nivel técnico del calzado aumente. “Cuanta más técnica se exija para una actividad de montaña, más importante será la estabilidad de las zapatillas”, señalan los profesionales de LaValencianaCalzados.

Otros aspectos a tener en cuenta para acertar de lleno con el calzado de montaña

Si hay otro factor que el usuario no debe descuidar, sin duda ese es el agarre, a tenor de lo que expone el equipo de la firma pacense.

“Si bien una suela capaz de proporcionar el agarre adecuado es fundamental en casi cualquier actividad, lo cierto es que al hablar de una actividad en la montaña esta prestación adquiere una importancia capital, dado que se pone especial énfasis en este aspecto cuando pasamos de hablar de un tipo de calzado urbano estándar convencional a una bota de montaña o zapatillas de trekking”, apuntan los expertos de LaValencianaCalzados.

“Una buena suela debe trabajar bien en todo tipo de superficies, incluyendo terrenos mojados, compactos, embarrados, húmedos e incluso helados, siendo esa ambivalencia la principal diferencia entre una suela eficiente y una realmente buena”, comentan.

No obstante, existen diferencias en los diseños de la suela, tal y como comentan desde LaValencianaCalzados. “Una suela alpina funciona mejor en actividades de montañismo, pero cuando hablamos de senderismo, normalmente se trabaja con suelas menos agresivas”, apunta su equipo de profesionales.

“Esto es así porque la suela es un elemento que no solo está pensado para facilitar el desplazamiento, sino que cuenta con un fuerte componente protector, siendo la principal barrera entre los elementos hostiles del entorno y las plantas de nuestros pies”, afirman.

En cuanto al aislamiento, es imprescindible que el calzado que se utilice para cualquier actividad de montaña o senderismo ofrezca unos niveles óptimos de transpirabilidad e impermeabilidad.

“El usuario tiene que ir cómodo, sentir el pie seco y protegido pero que sea capaz de respirar, evitando un hipotético sobrecalentamiento que derive en acumulación de sudor y lesiones en los tejidos. Pero también es vital mantener el pie aislado de la lluvia, el barro, la suciedad y las piedras, así que la clave es un buen equilibrio entre un tejido impermeable y transpirable”, señalan.

¿Cuándo se considera que un calzado es apropiado para ser usado en terrenos montañosos?

A grandes rasgos, cuando se habla en términos de “cómodo” y “seguro”, se hace referencia a un compendio de prestaciones que avalan la idoneidad de las zapatillas para ser usadas en determinados contextos en la montaña.

“El agarre, la impermeabilidad, la comodidad, el aislamiento, la transpirabilidad, la adaptación al terreno… todo ello debe merecer la atención del usuario porque son factores que pueden influir en su experiencia en la montaña, y por eso es importante que esté bien informado y que obtenga asesoramiento experto como el que ofrecemos en LaValencianaCalzados, donde podrá encontrar las mejores opciones para su escapada por la montaña”, sentencian.

Por tanto, la idoneidad de un calzado de montaña está en su diseño, en su concepción y en el empleo de materiales que posibiliten alcanzar las prestaciones que este tipo de botas y zapatillas necesitan reunir para poder ser utilizadas en entornos montañosos.