La plantilla municipal se moviliza por un convenio sin marcha atrás

El gobierno local ha conseguido unir en su contra a todas las secciones sindicales con representación en el comité de empresa del Ayuntamiento de Jerez (CGT, ATMJ, CSIF, CCOO y UGT) con su política de gestión de recursos humanos, contra la que la plantilla municipal se ha pronunciado con una caravana de protesta de más de medio centenar de vehículos, entre coches, motos y bicicletas.

Decenas de trabajadores han secundado la convocatoria del comité de empresa frente a lo que consideran una “vulneración de derechos y libertades” por parte del ejecutivo de Mamen Sánchez, así como para reivindicar ‘un convenio bueno y justo’ y el fin de la ‘persecución sindical’, como reza en el lema de la movilización motorizada que ha comenzado en las inmediaciones de Chapín sobre las cinco de la tarde, para concluir su recorrido horas más tarde en Las Angustias.

Los sindicatos denuncian que el gobierno local pretende debilitar su posición en la negociación del convenio con una serie de “coacciones sin precedentes” a los delegados sindicales, a las que se suma una “absoluta falta de transparencia” que, según el presidente del comité, Ismael García, “condiciona nuestro derecho a negociar libremente y de buena fe”.

La incoación de sendos expedientes disciplinarios a dos empleados municipales y la denuncia presentada ante los juzgados por el supuesto acceso fraudulento a expedientes municipales en plena negociación del convenio desencadenó la reacción de los sindicatos, que hacen partícipes a los empleados municipales de las acciones de protesta emprendidas por los delegados sindicales a finales de año en forma de concentraciones ante el Ayuntamiento durante la celebración de los plenos.

Las movilizaciones se enfocan igualmente contra los “traslados forzosos” de trabajadores y delegados sindicales que no comulgan con el ejecutivo local, así como contra las comisiones de servicios y asignaciones de funciones “a dedo” que inciden en la desigualdad salarial –ver tabla de reivindicaciones en la información anexa–.

El gobierno municipal remitió un comunicado a la plantilla días atrás en el que apunta a la paralización de la negociación del convenio por la incomparecencia del comité, cuyo presidente puntualiza que remitieron un escrito a la alcaldesa para comunicarle su decisión de no acudir a las reuniones por “las coacciones, la falta de garantías y porque, por primera vez en la historia, la propuesta de la que se parte está por debajo de lo que se tiene”.

Ismael García recuerda en este sentido que las secciones sindicales y el propio comité tuvieron que acudir a los tribunales tras declararse nulo el convenio para “obligar” al gobierno local a sentarse a negociar, al tiempo que insiste en que la propuesta inicial es inasumible porque “se le quita dinero a los trabajadores de base para pagar gratificaciones a dedo a altos puestos, sin que tampoco nos faciliten información sobre los complementos salariales porque no quieren que se sepa cuánto cobran”.

Las malas relaciones entre comité y empresa, así como la judicialización del enfrentamiento –el comité también está ultimando la demanda contra el gobierno local por la falta de acceso a los expedientes disciplinarios de los dos trabajadores denunciados por el accceso a numerosos expedientes–, repercuten en la calidad de los servicios por la falta de motivación de los trabajadores, señala García, quien considera que “el gobierno local tiene que solucionar esto si no quiere guerra, porque no vamos a permitir que nos pisoteen”.