El centro que llenó de vida el antiguo convento de La Merced

El edificio que hoy alberga al instituto Santa Isabel de Hungría es de principios del siglo XVII. Fue un convento de la orden de La Merced que, tras la desamortización de Mendizábal, se transformó en el Hospital de Santa Isabel de Hungría, de carácter municipal. Según explica el director, José María Gómez Velasco, "en los años sesenta, cuando se construyó el actual Hospital de Jerez, el de Santa Isabel dejó de serlo y el edificio, que se encontraba en mal estado, quedó abandonado. En el año 1988 se adjudicaron las obras para remodelar el edificio y convertirlo en un instituto de bachillerato, que sería el sexto de Jerez. La parte nueva se terminó en 1989 y las obras de remodelación de la parte antigua en el año 1990".

Este conjunto singular de indudable valor histórico se asienta en pleno barrio de Santiago y en el edificio, además de algunas aulas y espacios donde se han conservado las bóvedas y techos de madera, destacan el claustro y el sobreclaustro, donde se encuentra instalado el Museo de Tecnología Agraria Antonio Cabral y la escalera principal de hermosa fábrica. Esta escalera está situada en una de las pandas del claustro y realizada en caliza roja fosilífera.

José María Gómez cuenta que "durante los cinco primeros años de funcionamiento, el centro estuvo albergando, en horario de tarde, una sección de Formación Profesional y en 1998 se transformó en Instituto de Enseñanza Secundaria, en el que se imparte Enseñanza Secundaria Obligatoria y Bachillerato.

Este cambio de alumnado trajo consigo una serie de nuevas situaciones que, según el director, "se han tenido que afrontar de forma progresiva para adaptar el centro y su funcionamiento a las nuevas necesidades del alumnado, sobre todo el de Secundaria obligatoria, como intereses y edades distintos, disciplina y comportamiento o situaciones familiares que en la etapa anterior eran menos frecuentes".

Desde el curso 2003-04 se imparten enseñanzas de formación profesional específica en el ciclo formativo de grado superior de Integración Social y desde el curso 2006-07 el ciclo formativo de grado medio de Sistemas Microinformáticos y Redes.

José María Gómez reconoce que "nos supone un problema el mantenimiento de un centro situado en un edificio histórico sin que se recoja en la asignación económica para el mantenimiento esta realidad. En cambio contamos con el apoyo la delegada provincial de Educación, Blanca Alcántara, que ha visitado nuestro centro para interesarse por el estado de una parte de la cubierta de nuestro teatro. La reparación ya está asignada a una empresa, que está realizando el estudio de la obra".

Diplomado en Magisterio y licenciado en Psicopedagogía, José María Gómez llegó al instituto Santa Isabel de Hungría en el año 2000 como maestro asignado al departamento de Matemáticas para impartir clase en el primer ciclo de Secundaria. "En el año 2004 -cuenta- me incorporé al equipo directivo de Antonio Ledesma como jefe de estudios y el 2009 presenté mi propia candidatura. Fue una candidatura formulada con el propósito de continuar con el proyecto educativo del centro, elaborado por el equipo directivo anterior".

Asegura además que "me gusta la docencia y tampoco tengo problemas con la gestión del centro porque tengo un excelente equipo directivo".

En general dice contar también con la colaboración de la Asociación de Padres de Alumnos (Ampa), a la que califica de "estable, con una amplia trayectoria de trabajo y colaboración y formada por personas que comparten unos proyectos comunes, de forma que se van dando el relevo de forma natural". Concretamente, explica que "este curso ha asumido el cargo de presidenta Montaña Pérez, que sustituye a María Tobaruela, sin que haya habido ningún cambio en la actitud de colaboración que tradicionalmente se ha venido produciendo entre el Ampa y el equipo directivo, debido, entre otras razones, a la estabilidad de la junta directiva del Ampa y así como al hecho de que este equipo directivo es continuación del anterior".

El Ampa dispone de un local en el centro, en el que se suele reunir la junta directiva una vez a la semana para la organización de su trabajo y contribuir al funcionamiento del centro o atender a los padres

"En general -dice el director- podría decir que me siento orgulloso de trabajar en un centro en el que los buenos resultados en Selectividad, año tras año, provocan la alta demanda de alumnado para cursar Bachillerato".