Comienzan las obras de mejora de la carretera de acceso a la autopista desde La Granja

Ya han comenzado las obras de mejora de la carretera de acceso a la autopista AP-4 con la avenida de La Granja, al norte de Jerez (su denominación oficial es NR-4). Esta vía, que una vez culminada pasará a ser urbana, es una de las principales de la salida de la ciudad al conectar tanto con la autopista como con la autovía de Arcos y la CA-3107 (carretera de Caulina), que conecta con las carreteras de acceso a la zona rural.  

Los trabajos los ejecuta la constructora jerezana Aglomerados Andaluces SLU, ganadora de la licitación iniciada por el Ministerio de Transportes para mejorar este acceso a la ciudad que tiene una intensidad media diaria (IMD) de 7.982 vehículos diarios, de los que un 16,2% son pesados, según datos de la administración central de 2019.  

Ahora bien, tal y como recoge el proyecto, esta carretera no será desdoblada, sino que mantendrá un carril por cada sentido de circulación. La intervención se realizará a lo largo de los 1,2 kilómetros que separan la rotonda del Michelín, a la salida de Jerez, con la glorieta de conexión con la entrada a la autopista y la N-349 (en las inmediaciones de la Venta Esteban).  

Ahora bien, se mejorará su calzada, se construirán dos nuevas rotondas para mejorar la seguridad del tráfico con las vías transversales y se dotará de un carril bici de 2,5 metros de ancho que partirá de la rotonda de Michelín y concluirá en las inmediaciones de la Venta Esteban. También se dotará de acerado a ambas márgenes de la calzada.  

Por otro lado, una de las rotondas se construirá a la altura del cruce con la carretera de Caulina (que conecta Guadalcacín con Estella), un punto que actualmente está regulado por semáforos. Mientras, la segunda de las glorietas proyectadas se ha diseñado a la altura del camino que conecta la carretera de acceso a la pedanía guadalcacileña con la A-2005 (carretera de acceso a la autovía Jerez-Arcos), que a día de hoy únicamente está regulado por señales. 

Los trabajos, que se desarrollarán durante los próximos 19 meses, tienen un coste de unos 1,4 millones y serán financiados por el Ministerio de Transportes a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia que se está desarrollando con fondos europeos (los denominados fondos Next Generation). Una vez concluya esta intervención, la vía pasará a ser de competencia municipal, que deberá encargarse de su mantenimiento.