El corte de Honda sigue sin favorecer a nadie

Los propietarios de los comercios cercanos o colindantes a Honda siguen sin verle el beneficio al corte de la calle. "Nos ha hecho muchísimo daño -señalan desde 'Quecos'-. El problema es que todavía no se sabe si es peatonal o semipeatonal, porque aunque los coches no pueden circular porque han puesto maceteros, sí que lo hacen a veces las motos y las bicicletas, y eso impide que la gente pueda ir tranquila por en medio de la calle". Una de las soluciones que dan desde este comercio es que "se hubiera permitido el tráfico por calle Naranjas, porque hemos notado un bajón considerable de clientes desde que se cerró la calle". Desde 'Novamoda', en calle Santa María, piensan que el corte de Honda provoca que "cada vez la gente tenga menos ganas de ir al centro, porque se le ponen muchas trabas" y señalan que esto provoca que el centro de la ciudad esté muerto en muchas ocasiones. "Un sábado por la tarde, la calle Larga parece un desierto. Luego se quejan de que los bares no abran, pero ¿para qué? Si es que no les merece la pena", señalan desde otro comercio de esta céntrica vía.

Los clientes son también los primeros que no le ven la gracia al corte de Honda. "Si es peatonal, que coloquen una solería como en Larga, que igualen el acerado en altura, pero que no siga manteniéndose la estructura actual que tiene la calle. Parece como si hubieran hecho esto deprisa y corriendo", señala Juan, cliente que afirma ser " un habitual del centro". Otra clienta señala que "con estos cortes se castiga al usuario del coche. Lo que no es lógico es que para llegar al centro se tengan que dar mil vueltas. Así es normal que la gente prefiera acudir a los centros comerciales, donde es más fácil aparcar y realizar las compras".

Lo cierto es que desde la delegación de Movilidad ya se anunció que no será hasta 2010 cuando se puedan acometer las obras necesarias para convertir a Honda en una calle verdaderamente peatonal. Hasta entonces, los comerciantes de esta vía, que ya ha sufrido catorce cierres de establecimientos desde que se cerró al tráfico en enero, tendrán que soportar como puedan la inmediata campaña navideña.