El cuerpo de la mujer hallado en un pozo en Jerez estaba descuartizado y tapado con escombros

El cuerpo de la mujer que apareció en el fondo de un pozo en las inmediaciones del Cortijo de Ducha, un paraje rural situado en el extremo norte de Jerez, se encontraba desmembrado y tapado con escombros. Para recuperar el cadáver fue necesario la labor de especialistas de la policía debido a la profundidad en la que se encontraba.

La víctima, que ya ha sido identificada —una mujer de nacionalidad iraní de 64 años que llevaba desaparecida desde principios de julio— apareció muerta en el fondo del pozo, cuyo cuerpo fue trasladado en la jornada del domingo al Instituto de Medicina Legal de Cádiz para practicarle la autopsia. Sí se ha confirmado oficialmente que hay un detenido por estos hechos que continúan siendo investigados, unas diligencias que han sido decretadas secretas por el juzgado que las está llevando a cabo. El detenido ha confesado que mató a la víctima.

Ahora bien, este periódico ha podido saber que el único detenido por el momento estaba siendo vigilado desde hace días por la Policía y que sus últimos movimientos facilitaron la localización del pozo donde se halló el cuerpo de la mujer.

Fue en la mañana del domingo cuando se habilitó un amplio dispositivo policial tras hallarse el cuerpo sin vida de la mujer en el fondo del pozo. Para ello se contó con la participación de miembros policiales adscritos a las unidades de Subsuelo, Policía Científica y de Medios Aéreos. Mientras, la investigación está siendo realizada por funcionarios adscritos a la UDEV (Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta) de la y de la brigada de la policía judicial de la Comisaría de Jerez.

El pozo de riego donde fue hallado el cuerpo sin vida de la mujer se encuentra ubicado junto a un carril que rodea al Cortijo de Ducha, una edificación rural que años atrás fue completamente rehabilitada para albergar un negocio hotelero y hostelero, aunque este lleva cerrado varios años.