Los enfermeros de urgencias extrahospitalarias piden el fin a 15 años de discriminación

Más de medio centenar de enfermeros de urgencias extrahospitalarias se ha concentrado este jueves a las puertas del Hospital Materno Infantil de Jerez, movilización convocada por el Sindicato de Enfermería SATSE para reivindicar mejoras para estos profesionales tras 15 años de discriminación laboral y salarial.

Por unas "condiciones laborales dignas" y el "reconocimiento salarial de las especiales condiciones de trabajo", podía leerse en las pancartas desplegadas por los concentrados, mensajes que resumen las reivindicaciones del colectivo que atiende las urgencias fueran de los centros hospitalarios y de salud.

La concentración, a la que se han unido representantes sindicales y profesionales de todas las áreas sanitarias de la provincia (Jerez-Costa Noroeste, Bahía de Cádiz, Sierra y Campo de Gibraltar), así como de Sevilla, se produce a una semana vista de la reanudación de las reuniones de la mesa técnica de urgencia, prevista para el próximo 16 de marzo tras su paralización a finales del año pasado y en la que se sientan el Servicio Andaluz de Salud (SAS) y las organizaciones sindicales.

El delegado de SATSE en Jerez Zona, Francisco Villar, ha recordado que la mesa técnica de urgencia se retomó hace dos años para reclamar la revisión del acuerdo de 2007 por el que los profesionales del dispositivo de apoyo (DA) de las urgencias extrahospitalarias "no cobran una serie de complementos que se traduce en trescientos y pico euros menos al mes" pese a que desempeñan el mismo trabajo, incluso con más horas por la distorsión que generan los turnos en los descansos regulados.

Según Villar, "los profesionales de urgencias extrahospitalarias visten los mismos uniformes que todos los enfermeros del SAS y cumplen las mismas funciones, y lo que lo único que los diferencia es la nómina", motivo por el que exigen los mismos complementos, a saber: nocturnidad, festivos, turnicidad y peligrosidad.

El Sindicado de Enfermería baraja convocar una nueva protesta en Cádiz entre los días 17 y 20 de marzo, es decir, tras la reunión del comité técnico de urgencia, cuyos resultados marcarán la continuidad o el fin de las movilizaciones.