"Aquí estudié, me casé, bauticé a mis hijos y los matriculé"

Tras haber pasado "prácticamente toda mi vida" en el oratorio, dice que "las infra estructuras han mejorado pero antes había más respeto por parte de los alumnos a los profesores. Se les llamaba de don y yo todavía sigo haciéndolo con algunos".

Por si su vinculación con el centro fuera poca, sus dos hijos, que estudian segundo y quinto de Primaria respectivamente, también van a clase en el Oratorio Festivo. "Creí que iban a tener más problema por estar en el mismo sitio donde yo trabajo, pero qué va. Aquí son muy felices. Yo soy un enamorado de este colegio. Hice la Primera Comunión aquí, me casé aquí y aquí he bautizado a mis hijos. Incluso mi padre, desde que se jubiló, también viene por aquí a echar una mano. Tiene arriba un huerto hecho con macetas, porque terreno no tenemos".

Juan Manuel es además el autor de la maqueta del colegio que se encuentra junto a la escalera y que construyó junto a su novia, hoy su mujer, Araceli y su cuñado. "Nos llevamos cuatro meses para hacerla explica"