"Trabajamos para que la persona tenga una vida plena"

Afanas Jerez cumple 60 años y está de muy intensa celebración. Si hace unos días, recogía el Premio Ciudad de Jerez ‘Solidaridad’, este martes, 22 de octubre, a las 11 horas, la asociación celebrará un acto por su aniversario en los Museos de la Atalaya, "lleno de sorpresas". Será una ocasión para recordar logros, renovar compromisos y proyectar hacia el futuro acciones para seguir apoyando la completa inclusión de las personas con discapacidad intelectual y sus familias en la sociedad. Su presidenta, Eugenia García Mateos, hace aquí un recorrido por estas seis décadas de compromiso y dedicación en favor de las personas con discapacidad intelectual, y pone sobre la mesa los retos de futuro.

-¿Cómo afrontan estos 60 años de vida?

-Con mucha ilusión. Yo estoy empezando mi segunda legislatura y miro con mucha ilusión al futuro, a la vez que recordando el pasado y a todos los que han pasado por aquí y han hecho algo importante en nuestra asociación. Tenemos las miras hacia una modernización para adaptarnos a los tiempos.

-Si echa la vista atrás, ¿qué se ha conseguido?

-Muchísimas cosas. Desde los principios, hace 60 años, cuando no se pensaba que personas con discapacidad pudieran tener un espacio donde desarrollar su vida de relación con los demás, de actividades, de aprendizaje. Pues se ha evolucionado enormemente. Yo creo que Afanas ha ido con los tiempos. Tenemos usuarios en el tejido laboral, en empresas públicas y privadas, preparando a otros para entrar y que tengan un trabajo igual que cualquier otra persona. Atendemos desde adolescentes hasta personas de 82 años, con todas sus características. La diversidad es tan grande que ofrecemos un gran abanico de servicios. Todo esto nos hace crecer.

-Usted ha vivido además esta situación en primera persona, tiene una hermana melliza con discapacidad.

-Sí. Mi hermana es una persona con grandes necesidades de apoyo y ella está casi desde los inicios en Afanas. Entonces en Jerez no había nada y tuvo que estar interna en un centro en Sevilla durante un tiempo, hasta que se incorporó a Afanas y a un centro de grandes afectados que es donde está ahora, nuestro centro residencial 'Vistahermosa', en unidad de día. Ha sido otro mundo, de tener que estar en casa... Aunque mi familia siempre ha sido muy abierta a la sociedad, pero en otras los hijos no salían de sus cuatro paredes. Miedo al rechazo, al diferente... Yo tengo 63 años y te estoy hablando de las experiencias de niña. Sí, yo veía cierto rechazo, incluso las familias se ponían sus propios obstáculos. Hoy es totalmente diferente. Las personas con discapacidad saben reclamar sus derechos y las familias también están preparadas para eso.

-Y vosotros tenéis mucho que ver en ello.

-Por supuesto. Hay una cosa muy importante: la asociación lo que hace es ayudar, acompañar e informar. Además de prestar un servicio a los usuarios, también ofrecemos a las familias información plena, es decir, todo lo que nos llega la familia es receptora. Cuando estás bien informado puedes defenderte en la sociedad. Nuestra asociación está basada en familiares, son el pilar. Y durante todo este tiempo ha habido un grupo de personas que ha sido muy importante para Afanas, y nombro a Flaviano Valencia, Paco Izquierdo, Mariele Rider, el gran apoyo de Guillermina Durán, Alfonso Candón, Juan Jorge Racero, Yessika Quintero, María Dacia González-Gordon (que da nombre a la residencia de adultos), su hija Begoña, etc. Son pilares importantes de Afanas. Y, claro está, cruciales son las subvenciones, como la que nos acaba de conceder la Junta de Andalucía de 180.000 euros para la adaptación del Centro Ocupacional Copad. Nosotros nos mantenemos sobre todo con el concierto económico con la Junta de Andalucía, con cuotas de socios, pero que son muy pequeñas, y con donaciones.

-¿Qué retos, metas, tienen a la vista?

-Sobre todo, ahora estamos muy centrados en el tema laboral. Estamos buscando una formación reglada, muy potente, que nos convierta en un referente. Un servicio no solo para nuestros usuarios, sino para quien venga de fuera también. Para ello necesitamos muchos recursos y un tiempo para madurarlo y prepararlo. Hemos avanzado, pero queremos hacerlo aún más. Y, en general, avanzar en todo. Nosotros trabajamos en la persona, y en todo lo que quiere la persona. Estamos en Plena Inclusión, que nos da unas pautas a seguir, donde la persona es el centro. La persona decide. Ya no existe la incapacitación para las personas con discapacidad legalmente, lo que hay es una curatela que decide el juzgado. Y nosotros lo que trabajamos sobre todo es la autonomía personal, dentro de las capacidades de cada uno, y en pensar qué le podemos ofrecer para que tenga una vida plena. También hemos modernizado instalaciones y hemos adaptado el mobiliario, que sea acorde y, de hecho, los colores los eligen ellos. Todo ha quedado muy bonito. Y es que nuestra razón de ser son ellos.

-¿Cómo será la gran celebración del 60º aniversario en la Atalaya?

-Pues esperamos que sea muy bonito y... es secreto (ríe), no podemos contar muchas cosas, pero sí que participará mucha gente... Será dinámico y muy especial. Y nos lo pasaremos muy bien.

-Y llega tras recibir días atrás el Premio Ciudad de Jerez. Está siendo un año movido.

-Sí está siendo un año muy importante: con una convivencia familiar a la que vinieron 300 personas, el cambio de logotipo, el Premio Ciudad de Jerez, ¡que no lo teníamos! Y nos los merecíamos, después de 60 años trabajando para la sociedad de Jerez, desde la base. Y ahora la fiesta de este martes. Estamos muy emocionados. Felices.