Las familias del CEIP Tartessos piden al Ayuntamiento más seguridad a la entrada y salida del centro

La comunidad educativa del CEIP Tartessos ha denunciado la situación que viven las familias del centro a diario cuando tienen que acceder al colegio. Desde 2020, el Ayuntamiento instaló en las inmediaciones de este centro educativo una señal de tráfico por la cual se prohíbe la circulación de vehículos por la calle Alborán tanto a la entrada como a la salida.

Exactamente, existe una prohibición de circular por esa zona desde las 8:45 de la mañana hasta las 9:15 y de 13:45 a 14:15. Además, tal y como informan los padres y madres del centro, "se colocan también unas vallas, que no se debería porque está la señal, pero como un motivo más de precaución, y es algo que hace a diario el portero del colegio o algunos padres".

Tan sólo puede circular por la calle un autobús de línea que al no poder cambiar el recorrido lo hace en ese intervalo.

A pesar de esta prohibición, muchas familias aparcan sus coches junto a las vallas "creándose un embudo con coches por cada lado, encima de las aceras algo que te obliga incluso a tener que ir por la carretera cuando a lo mejor las vallas no están puestas y con el peligro que supone".

Esta misma semana, a un pequeño, según han descrito a este medio algunos padres y madres del centro, "se le cayó una valla encima porque un coche pasó y la golpeó. No le pasó nada, pero pudo ser muy grave".

Ante esta situación, el Ampa ha pedido al Ayuntamiento que "coloque algunos distintivos más llamativos en esas señales, porque hay gente, no los familias que saben lo que hay, que no ve esas señales y acaban pasando y eso puede provocar un día un grave accidente".

Algunas familias también han pedido "más presencia policial a la entrada y la salida del centro como ocurre a diario en otros centros de la ciudad".