Los hoteles de Jerez cierran su mejor verano desde el final de la pandemia

El número de visitantes alojados aumentó un 2,4% respecto al año pasado

La ocupación fue del 77%, casi siete puntos porcentuales más respecto a 2023

De sedes de cajas de ahorros a hoteles de cuatro estrellas en el centro de Jerez

Dos turistas por el centro de Jerez.
Dos turistas por el centro de Jerez. / Manuel Aranda

Los hoteles de Jerez han tenido un buen verano. De hecho, ha sido el mejor desde que se decretó la pandemia del coronavirus a tenor del volumen de visitantes alojados en los establecimientos hoteleros de la ciudad.

Entre los meses de julio y agosto, 66.875 personas pasaron, al menos, una noche en un hotel de Jerez, un 2,4% más respecto al estío del año anterior. Este es el registro más alto desde 2017, donde se superaron los 69.000 viajeros, según la encuesta de ocupación hotelera que el Instituto Nacional de Estadística (INE) publica mensualmente.

El mes de julio ya avanzaba que sería un buen verano y los registros de agosto lo han acabado confirmando. Así, creció tanto el turismo nacional como el extranjero, aunque este último aún sigue sin alcanzar el volumen que tenía antes de la grave crisis provocada por el covid-19. De este modo, de las más de 66.800 personas que se alojaron en un hotel en Jerez, unos 17.500 procedieron de fuera de España. En cambio, antes de la pandemia, esta cifra rondaba los 20.000 en la suma de los meses estivales.

Ahora bien, cuando el sector empezó a recuperarse de las consecuencias de la pandemia, se produjo un notable auge del turismo nacional, que empezó a contabilizar cifras superiores a las que tenía en la anterior década. Así, si hasta 2019 en torno al 70% de los clientes de los hoteles de la ciudad eran españoles, ahora esta cuota ronda ya el 74%, teniendo en cuenta los registros que publica el organismo estadístico público.

Estancias más largas

Durante este verano, no solo se incrementó el número de viajeros en los establecimientos hoteleros de la ciudad sino que también se produjo un aumento de la estancia media. Esta magnitud se situó en el mes de agosto en los 2,77 días, dos décimas más que en 2023, alcanzando así uno de los registros más altos de los últimos años —solo se superó en 2021 donde se situó en 2,79 días—.

Ambos factores —aumento de la estancia y de los viajeros— hizo que se incrementara también el número de pernoctaciones en los hoteles de la ciudad al superarse las 174.000. No en vano, este es el mejor registro de toda la serie histórica publicada por el instituto estadístico superando, incluso, a 2017 donde, a pesar de que hubo más viajeros, la estancia media fue inferior.

Mientras tanto, la ocupación por plazas hoteleras fue del 77,6% durante todo el mes, aunque aumentó hasta un 82,5% durante los fines de semana. Ambos porcentajes son superiores a los registrados hace un año —entonces fueron de un 70,9 y un 81%, respectivamente—.

Estos registros contrastan con los apuntados días atrás por Horeca, la patronal hostelera y hotelera de la provincia que aseguró que el porcentaje de ocupación en Jerez había sido de un 87%. La diferencia estriba en la metodología utilizada. El INE realiza mensualmente una encuesta pormenorizada estandarizada entre los establecimientos hoteleros mientras que la entidad patronal asegura que sus cifras parten de los niveles de ocupación que les indican sus asociados.

Los precios siguen subiendo

Al igual que en el conjunto del país, la noche de hotel en Jerez continúa encareciéndose, aunque sigue lejos de los precios que se abonan en los destinos de costa. Según el INE, el precio medio de la habitación en agosto se situó en los 94,55 euros, el importe más alto en un mes de agosto —ha subido dos euros respecto a 2023—.

Los precios medios que se pagan en Jerez son similares al de otros puntos turísticos de interior como Segovia, Santiago y Pamplona y han tenido un incremento similar al que se ha producido en otras ciudades como Zamora, Zaragoza o Logroño.

Hay que tener en cuenta que el verano no es el momento del año donde los precios de una habituación hotelera están más caros. Los importes más elevados suelen registrarse en los meses de abril y mayo, un momento de gran afluencia turística en la ciudad por la celebración de la Semana Santa (hay años que se celebra en marzo), la Feria del Caballo o el Gran Premio de España de Motociclismo.

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