Tribuna Económica
José Ignacio Castillo Manzano
La financiación autonómica, ¿Guadiana o Rubicón?
El Ayuntamiento de Jerez cerró el año pasado con el mayor nivel de ingresos tributarios de los últimos años. Con los registros recogidos en la liquidación del presupuesto de 2023, el Consistorio obtuvo unos 137,2 millones de euros más en derechos de cobro. Ahora bien, aunque se superaron las previsiones iniciales (el ejercicio pasado fue el primero con cuentas prorrogadas), la recaudación neta que entró en la caja municipal fue de 114 millones.
Uno de los principales causantes del incremento de la recaudación fue la incorporación a los ingresos de una prestación patrimonial que deben abonar los promotores de plantas de generación de energía renovable, unos importes que han empezado a contabilizarse el pasado año. Eso sí, también se incrementó la plusvalía, aunque sigue lejos de los niveles de recaudación antes de los problemas judiciales que tuvo este tributo, y por los aprovechamientos urbanísticos.
La liquidación tributaria del pasado año superó así al mejor registro alcanzado hasta ahora, contabilizado en 2022, donde se alcanzaron los 135 millones de euros en la suma de los capítulos uno a tres del presupuesto (impuestos directos, indirectos, tasas, precios públicos y otros ingresos análogos), En aquel ejercicio se produjo un apreció un destacado crecimiento de la recaudación fiscal por la mejora de la actividad urbanística (impuesto de construcciones y tasas urbanísticas), un fenómeno en el que también intervino la concesión de licencias para la construcción de las primeras plantas fotovoltaicas que comenzaron a construirse en la campiña jerezana, aunque también se produjo una mejora de la actividad residencial.
En 2023 empezaron a incorporarse en el presupuesto los ingresos por la prestación patrimonial de carácter público no tributario por el uso temporal del suelo rústico, nombre oficial que recibe el importe que los promotores de plantas de generación de energía renovable deben aportar a las entidades locales —una cuantía que supone el 10% por ciento del importe total de la inversión prevista, según se recoge en la normativa autonómica, que puede reducirse por parte de los ayuntamientos mediante ordenanza, algo que no ha aplicado el Consistorio jerezano—.
Durante el pasado año, el Ayuntamiento obtuvo unos derechos por este concepto de más de 6,5 millones, de los que 3,7 millones ya ha ingresado en caja. Mientras, en lo que va de año, con datos de la ejecución presupuestaria hasta mediados del pasado mes de julio, el Consistorio jerezano ya ha obtenido algo más de un millón de euros. Con estos importes, este ingreso se ha convertido en el sexto ingreso de mayor importe superando a tributos como la plusvalía, el IRPF, el IVA o la tasa de licencias urbanísticas, entre otros.
A lo largo del año pasado, el Ayuntamiento percibió algo más de seis millones de euros por la plusvalía, el impuesto que grava el beneficio de las transmisiones patrimoniales, casi el doble que en 2022. Sin embargo, sigue lejos de los registros que alcanzaba antes de que el sistema de cálculo de su base impositiva se declarara inconstitucional y se estableciera un nuevo método de cálculo. En lo que va de 2024, ha obtenido unos 2,7 millones de euros de derecho de cobro.
Mientras tanto, la recaudación por los principales tributos (IBI, tasa de basuras y ‘sello’ del coche) se ha mantenido relativamente estable en los últimos años. Así, por el IBI urbano, principal ingreso de capital de la tesorería municipal por vía tributaria, se contabilizó un ejercicio más entre los 45 y 46 millones de euros. Mientras, la tasa municipal por el servicio de recogida de residuos rondó los 17 millones de euros y el impuesto de circulación (IVTM), los 10,8 millones.
No creció, en cambio, el Impuesto de Actividades Económicas (IAE), el tributo que abonan las empresas que facturan más de un millón de euros al año. Por esta vía recaudatoria, el Ayuntamiento jerezano ingresó unos 7,6 millones de euros; en 2021, sin embargo, alcanzó los 9,4 millones de euros en derechos reconocidos.
También bajaron los importes del impuesto de construcciones (ICIO), al situarse en el entorno de los siete millones, unos 400.000 euros menos que en 2022. Mientras los ingresos por tasas urbanísticas se mantuvieron (unos 3,2 millones).
Actualmente se encuentran en exposición pública las modificaciones de las ordenanzas fiscales que regulan el impuesto de circulación, el IAE y el ICIO. Estos cambios forman parte del compromiso alcanzado con el Ministerio de Hacienda a finales del pasado para refinanciar el grueso de la deuda que el Ayuntamiento de Jerez arrastra. A este grupo se ha unido también la modificación de la norma que regula la plusvalía, que tenía pendiente de adaptarse a los cambios normativos tras la sentencia del Tribunal Constitucional que anuló el anterior sistema de cálculo.
Tal y como se recogen en los informes técnicos de estas modificaciones fiscales, el Ayuntamiento prevé recaudar unos 4,2 millones de euros una vez entren en vigor. Así, por el IAE prevé aumentar sus ingresos en unos 2,6 millones de euros (se ha aumentado el coeficiente que se utiliza para calcular el tributo), por el ‘sello’ del coche unos 823.000 euros (se ha eliminado la bonificación a los vehículos históricos) y por el impuesto de construcciones unos 786.000.
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