Jerez, ciudad del vino y capital de la cultura

Hasta hace bien poco, cuando viajábamos, era habitual enviar a familiares y amigos las características postales que adquiríamos en quioscos, estancos o tiendas de 'souvenirs'. Esto parece que ha pasado de moda ante la inmediatez de las fotos y 'selfies' tomadas con nuestros dispositivos electrónicos desde los lugares más recónditos y exóticos.

Un motivo para que en este nuevo 'Rebusco' podamos ver algunas imágenes del pasado y el presente que forman parte de nuestra historia local pero que, sin duda, tienen proyección internacional. Una forma de mirar en el legado que nos dejaron nuestros antepasados para transmitirlo a las nuevas generaciones.

Jerez ha apostado por participar en dos candidaturas de alto nivel. Una, para ser la Ciudad Española del Vino en el 2026, distinción que otorga la Asociación Española de Ciudades del Vino (Acevin), la otra para llegar a ser, en el 2031, Capital Europea de la Cultura.

Ambas, si lo conseguimos, servirían para prestigiar aún más a nuestra ciudad.

Como dejó escrito el actual presidente del Consejo, César Saldaña en un artículo publicado en este Diario el 18 de septiembre de 2019: 'la nuestra (la cultura) requiere una regeneración constante, en la que el conocimiento y el respeto del pasado debe combinarse con las aportaciones del presente'.

Recurrimos, por tanto, como postal poética al hermoso soneto que el escritor argentino Jorge Luis Borges dedicó al vino:

¿En qué reino, en qué siglo, bajo qué silenciosa

conjunción de los astros, en qué secreto día

que el mármol no ha salvado, surgió la valerosa

y singular idea de inventar la alegría?./

Con otoños de oro la inventaron. El vino

fluye rojo a lo largo de las generaciones

como el río del tiempo y en el arduo camino

nos prodiga su música, su fuego y sus leones./

En la noche del júbilo o en la jornada adversa

exalta la alegría o mitiga el espanto

y el ditirambo nuevo que este día le canto

otrora lo cantaron el árabe y el persa./

Vino, enséñame el arte de ver mi propia historia

como si ésta ya fuera ceniza en la memoria.

Shakespeare en Jerez

Por primera vez, en los 19 años que viene celebrándose el homenaje a Shakespeare en Jerez, la primera autoridad municipal, la alcaldesa María José García-Pelayo, ha asistido al mismo. 

Tuvo palabras de agradecimiento para los promotores, ya que ponen en valor el patrimonio jerezano reflejado en la historia de la Literatura Universal, ratificando el compromiso del Ayuntamiento de Jerez para próximas ediciones.

Como se indica en el comunicado oficial 'uno de los proyectos más importantes y estratégicos que Jerez tiene sobre la mesa actualmente es la candidatura a Capital Europea de la Cultura en el año 2031. 

Actos como este homenaje, sencillo pero trascendente, deben ser considerados a la hora de su inclusión como aval para esta posible designación.

Como también, distribuir por la ciudad, en lugares estratégicos, placas de cerámica en la que puedan leerse frases que famosos viajeros y escritores dedicaron a Jerez y sus vinos. La lista es amplia: Byron, Blasco Ibáñez, Richard Ford, Pérez Galdós, Víctor Hugo, Shakespeare, Palacio Valdés....etc.

Ratonero y bodeguero

El popular perro ratonero bodeguero andaluz fue el invitado de honor en tres de los actos de la pasada Fiestas de la Vendimia, destacando su presencia en la Pisa de la Uva.

Esta raza canina, originaria del Marco de Jerez, ha alcanzado la máxima distinción internacional otorgada por la Federación Cinológica Internacional (FCI), la organización canina más grande del mundo. Este reconocimiento convierte al ratonero bodeguero andaluz en la décima cuarta raza española oficialmente reconocida a nivel global.

El origen de esta raza se encuentra en los perros terrier de los comerciantes vitivinícolas ingleses que se asentaron en la zona a finales del siglo XVIII y principios del XIX.

Durante décadas se mantuvo como perro de trabajo en las bodegas de Jerez, pero fue Bartolomé Agustín Benítez Pérez-Luna quien realizó los primeros pasos para el reconocimiento de la raza y registró el Club Español del Ratonero Bodeguero Andaluz (CERBA). En un proceso que siempre es largo y costoso, diferentes criadores y aficionados a la raza elaboraron el estándar que finalmente fue reconocido por la Real Sociedad Canina de España, y como raza autóctona por el Ministerio de Agricultura en el año 2000. En el 2020, Por su parte, el Ayuntamiento de Jerez declaró a la raza Patrimonio Cultural Inmaterial de la Ciudad, convirtiéndose en la primera raza nativa española en alcanzar este estatus.

Este nuevo reconocimiento permitirá impulsar la protección, mejora de la cría, además de competir en los certámenes de la FCI y optar a sus títulos.

A uno de ellos, mascota de Álvaro Domecq Díez, lo vemos en esta foto de 1956 que publicó la revista La Actualidad Española. 

Y la única bodega que lo reprodujo en una etiqueta fue las bodegas Blanca Reyes. Gugui era el perrito que durante años tuvo los cuidados de Telmo Moreno y su madre.

Embajadores de Japón

Con motivo de la celebración de la feria internacional de los vinos nobles (Vinoble) que tuvo lugar en nuestra ciudad los días 27 y 28 de mayo pasado, nos visitó el actual Embajador de Japón en España, el Excmo. Sr. Takahiro Nakamae.

Durante su estancia fue recibido en el Ayuntamiento por la alcaldesa, Dª. María José García-Pelayo, confirmando las buenas relaciones que ese país mantiene con Jerez, tanto comerciales, por la exportación de vinos, como culturales, por los buenos aficionados al flamenco que nos visitan cada año.

El diplomático nipón participó en un acto de promoción de la bebida tradicional de aquel país, el sake. Fue una gran oportunidad para dar a conocer a los expertos y sumilleres los diferentes tipos, entre ellos el añejo 'koshu'.

Experiencia que muy posiblemente se repita en breve,

Según la información que he recabado, la primera visita de un embajador japonés a Jerez tuvo lugar el año 1974. Ese año la Fiesta de la Vendimia fue dedicada a Japón. Acontecimiento que muchos recordamos por lo novedoso y exótico. La prensa local dio una amplia cobertura, y el embajador, Shoji Sato, plasmó su firma en una bota

Unos años más tarde, en 1979, vendrían Hiroshi Yokota y, unos meses después, Hiroshi Uchida.

A finales del siglo XX, concretamente en 1982, lo haría Eikichi Hayashiya, gran hispanista.

Bien entrado el actual siglo, en el 2014, la lista se completa con Satoru Satoh, y Kazuhiko Koshikawa.

Invitado por la Universidad de Cádiz, terminando su ejercicio en el 2022, asistiría a las jornadas organizadas japonesas en el campus de Jerez, el embajador Kenji Hiramatsu.

Personajes retratados

La conferencia de la Cátedra del Vino de este año ha estado a cargo, como no, por un veterano catedrático, por el profesor don Luis García Ruiz, además de ser miembro numerario de la Real Academia de San Dionisio, fue miembro del Consejo Consultivo de Andalucía, presidente de Fedejerez y del Consejo Regulador.

En su exposición hizo una relación de nombres importantes en el sector, entre ellos: Eulogio Ingelmo, tío del periodista Pedro Ingelmo, Rafael Balao, Luis Caballero, Fernando García-Delgado, Manuel Lozano, Mauricio González-Gordon Díez, Francisco Valencia, Santiago Lledó, Toto Barbadillo, Diego Ferguson, José María Quirós, Juan Luis Bretón, o José Ignacio Domecq, 'la nariz' del jerez, entre otros.

Por mi parte, si me lo permite mi colega académico, traigo algunos nombres que destacaron en un tiempo anterior.

Empecemos por Pedro Domecq Loustau (1824-1894), con este retrato de su madurez poco conocido, ahora que celebramos el 150 aniversario de su brandy Fundador.

Seguimos con el retrato al óleo de José María López de Carrizosa y Pavón, I marqués del Mérito, nacido en Jerez en 1826, y fallecido en la misma ciudad en 1881?.

Hijo de José López de Carrizosa y Dávila y Vicenta María Pavón y López de Carrizosa, marquesa de Casa Pavón. Casó con María de los Ángeles Garvey y Capdepon.

Otro de los retratados, y enmarcado, es Pedro Julián Pemartín Rhodez (1771- 1845), natural de la villa francesa de Olorón, Dejó el negocio bodeguero, fundado hacia 1818, a sus tres hijos varones supervivientes, Julián, José y Francisco. Sería la primera casa exportadora de vino de Jerez en 1856 1862.

En 1866, Julián Pemartin Laborde continuo el negocio en solitario, encontrándose sus bodegas entre las diez principales exportadoras en 1869. 

La firma presentó expediente de quiebra el 23 de junio de 1870, el mismo año en que se inauguraba el monumental palacio, el actual Recreo de las Cadenas.

De ese periodo de esplendor del jerez es el jerezano José María Fernández y López, nacido en 1798. Sus padres eran Juan Alonso-Fernández, de Aviada (Burgos), y Ana María López, de Jerez. Casado con Josefa María González de Molina, con la que tuvo tres hijos José María, Manuel María y María del Carmen. 

En 1819 le compró una viña, en el Pago de Doña Juana o Cerro de Santiago, y en 1828 empezó a labrar las viñas “El Majuelo” y “El Carrascal” que ya le pertenecían. Tenía tres bodegas en Jerez: “La del Arroyo”, “Criaderas de Lealas” y “Criaderas de Canto Gordo”. Sus bodegas pasaron, con el tiempo, a manos de los Fernández Gao, Mackenzie y Harveys. Falleció en Jerez el 26 de octubre de 1864.

Su hijo, José María Fernández y González (1844 -1914), funda en Jerez un negocio de vinos en 1880, y en 1896 se asocia con Manuel Cantillo y García, que tenía una bodega situada en la calle Arcos, que posteriormente fue adquirida por Manuel de Misa y Bertamati.

Presidió la Sociedad Anónima de Abastecimiento de Aguas de Jerez entre 1912 y 1914.

Cerramos, ya en pleno siglo XX, con Fernando Carrasco Sagastizabal, nacido en Jerez en1899 y fallecido en su ciudad natal el 19 de enero de 1982. Diputado a Cortes por la Diputación Provincial de Cádiz, en 1927.

Sus bodegas de la calle Cordobeses fueron adquiridas por Joaquín Rivero para crear Tradición.

Cartel, bodega y Sandeman

Como se ha dicho en muchas ocasiones, la publicidad generada por las bodegas del Marco ha sido excepcional, tanto por su calidad como por su variedad. Numerosos han sido los artistas que han participado en este proceso a lo largo de varios siglos.

A pesar de ello, aún seguimos sin saber la autoría de muchos de ellos, tal es el caso del atractivo cartel que anuncia el vino Inocente de Valdespino. Sabemos que fue impreso en los talleres litográficos de Simeón Durá, de Valencia, fechándose a finales de los años `20, por lo que bien podemos adjudicarselo a algún artista valenciano de aquel periodo tan fecundo para la publicidad.

Otra de las incógnitas que planteamos, no resuelta por los especialistas en la materia, es la del imponente casco de bodega situado entre las calles Cervantes y Luis Pérez, En la parte superior de la fachada, entre dos ventanas ovales, y orlada en un recuadro aparecen las iniciales A.A.D. año de 1871.

¿Quién es este bodeguero con estas iniciales?.

Para cerrar, volvemos a lamentar el estado en el que se encuentra el monumento que se le dedicó al fundador de las bodegas Sandeman, George Sandeman (1765-1841), en el parque del mismo nombre.