Menos alumnos para un nuevo curso escolar en Jerez marcado por las obras

Todo listo. Después de semana y media de actividad tras las vacaciones, los centros educativos de la ciudad, desde segundo ciclo de Infantil, Primaria y Educación Especial, arrancan el curso escolar mañana martes 10 de septiembre. El día 16 tocará el turno para Educación Secundaria, Bachillerato, Formación Profesional y Educación Permanente (centros de adultos), mientras que el día 20 lo harán las enseñanzas de régimen especial (Música, Danza, Artes Plásticas, Diseño, Conservación y Restauración de Bienes Culturales, Arte Dramático e Idiomas). 

En Jerez, se espera que vuelvan a clase en torno a dieciséis mil alumnos, una cifra que no será oficial hasta mañana, ya que la delegación territorial de Educación no ha ofrecido datos locales (sólo provinciales) a los medios hasta el momento. 

Con la Lomloe en pleno funcionamiento, ya que en los dos últimos años se ha ido incorporando paulatinamente a los distintos cursos de Educación Primaria y segundo ciclo de Infantil, la novedad de este 24-25 será una vez más el descenso en el número de plazas, un dato motivado por la baja natalidad que arrastra el país desde hace unos años. Es más, a nivel provincial el dato es escalofriante, pues el curso comenzará con 25.000 estudiantes menos en Cádiz, la mayor bajada de la serie histórica en un inicio de curso en Andalucía. 

En la ciudad, los focos estarán centrados en dos colegios, el CEIP Elio Antonio de Nebrija de La Granja y el CEIP Tartessos. Las obras acometidas en los últimos meses en sus instalaciones hicieron que a final de la pasada semana, sindicatos y partidos políticos denunciaran una posible falta de seguridad para vuelta del alumnado a las clases, algo que desde el Ayuntamiento, encargado de coordinar dichas obras gracias a los fondos europeos, se ha comprometido a supervisar, dejando claro que todo arrancará con normalidad.

Precisamente, el Ayuntamiento, a través de la delegación de Educación, ha realizado durante los últimos meses diferentes trabajos de mantenimiento en estos colegios. Entre ellos destaca el pintado de las fachadas exteriores del CEIP Isabel La Católica, que llevaba 16 años sin recibir una manita de pintura en esa zona, o arreglos diversos en sanitarios, electricidad y persianas de varios colegios de la ciudad como Membrillar, Poeta Carlos Álvarez, Mesas de Asta, Cuartillos, Miguel de Cervantes, Luis Vives, Torresoto o el CEE La Merced, entre otros.

Por otro lado, se ha llevado a cabo la limpieza de tuberías y canaletas en los CEIP Antonio Machado, Blas Infante y Pío XII.  

Además, se han ejecutado intervenciones en centros como Las Granjas, con la construcción de un pasillo que une el edificio de Primaria con el de Infantil, o el nuevo comedor del CEIP Arana Beato, una petición que la comunidad educativa del centro llevaba solicitando a la Consejería de Educación desde hace varios años y que finalmente se ha hecho realidad en este curso 24-25 que empezará oficialmente mañana. 

En lo meramente educativo, el comienzo del curso escolar tendrá también otro foco importante de actualidad, el del colegio Luis Vives. Allí, un grupo de padres han mostrado su malestar por la negativa de la Junta de desdoblar la clase de 2º de Primaria en la que habrá 28 alumnos, seis de ellas con Necesidades Especiales Educativas. 

En principio, la Consejería ha enviado un docente más para que, a nivel interno, esta situación se pueda realizar, una solución provisional que la comunidad educativa no comparte. 

Problemas con los porteros

Otro de los asuntos que preocupan a algunas comunidades educativas de la ciudad en este inicio escolar es la falta de porteros del Ayuntamiento. Esta situación no es nueva, y se lleva arrastrando desde hace varios años. 

Sin embargo, el tema se ha agravado este año, ya que un número significativo de estos trabajadores han alcanzado ya los 60 años de edad o los han superado, y por tanto, acogiéndose al convenio municipal, tienen la posibilidad de compactar horas de cara a la jubilación, por lo que en lugar de trabajar cinco días a la semana, lo hacen tres o cuatro. 

Este hecho provoca que en algunos colegios, como ocurre por ejemplo en el Isabel La Católica o en La Ina, durante algunos días de la semana estén sin porteros, una circunstancia que puede afectar al día a día de los centros. 

La idea del Ayuntamiento era solventar esta situación con el nuevo proceso de estabilización, algo que al estar paralizado, ha hecho que tengan que buscar otra alternativa.