"El mejor alcalde que ha tenido Jerez"

Jerez/El reloj del Ayuntamiento toca las seis de la tarde y las luces navideñas que adornan los árboles de la calle Consistorio se encienden. Isabel Donaire y su hijo Mauricio caminan entre saludos y besos de una pequeña multitud que a esa hora se agolpa frente a la puerta principal de la Casa Consistorial. Sus pasos se detienen en el centro de una pancarta donde puede leerse: ‘Por un trato igualitario a Pedro Pacheco’. Ella es la esposa y él el hijo del político que durante 24 años fue alcalde de esta ciudad; ahora, a las puertas de la administración que dirigió, su familia, amigos, antiguos compañeros de partido y de corporación, representantes de distintos colectivos de la ciudad, trabajadores y ex trabajadores municipales y otros ciudadanos reclaman que sus años de condena en el centro penitenciario de Puerto 3 se desarrollen en las “mismas condiciones” que cualquier otro recluso.

La concentración, a la que acuden unas 300 personas, según estimaciones policiales, evita ser crítica aunque no obvia su claro componente reivindicativo. Eso sí, los organizadores evitan personalizarla contra alguien o contra algo pues no se quiere perjudicar a Pacheco. Los acontecimientos ayudan a explicar el leitmotiv de la concentración. Hace varias semanas, la dirección de Puerto 3 decidió trasladar de módulo al ex regidor tras un registro en su celda donde se le retiró un crucifijo de madera de siete centímetros y de apenas 70 gramos de peso que le había regalado un preso, de un libro de más y de una de las dos almohadas que tenía al entenderse que estaba infringiendo el reglamento penitenciario. Pacheco ha pasado del edificio 12 al 8, es decir, de un módulo de respeto (donde se encuentran los presos menos conflictivos) a otro con internos comunes. También hay que tener en cuenta que al ex regidor, por el momento, no se le ha concedido el tercer grado penitenciario a pesar de que su defensa insista en que ya se ha cumplido más de un tercio del conjunto de sus condenas.

Al poco de iniciarse la concentración, dos espontáneos rompen el silencio estipulado por la organización. El primero grita: “Viva don Pedro”. Otro le acompaña: “Viva Jerez”. Y, finalmente, un tercero decide sumarse: “El mejor alcalde que ha tenido Jerez”. Sin embargo, pronto es acallado por parte de los concentrados ya que se calienta y empieza a hacer comparaciones con otros casos judiciales. No se quiere que nadie manche la intención y las características de la concentración.

En la céntrica calle Consistorio acude una mezcolanza de distintos ámbitos de la ciudad, el grueso vinculado de un modo u otro a los años de Pedro Pacheco al frente del Ayuntamiento. No faltan los más cercanos, los que acuden asiduamente a Puerto 3 para visitarle y pasar los minutos que permite el régimen penitenciario, entre los que se encuentra José Rodríguez Carrión. No faltan, tampoco, los habituales en cualquier iniciativa de apoyo al ex regidor que surja como Manuel Muñoz Natera o Paco Flores, por citar algunos. También se dejan ver ex concejales de distintas corporaciones, ya fueran andalucistas o de otras formaciones como Antonio Conde, Raúl Ramírez, Manuel Rosa, Rocío Montero, Casto Sánchez, Miguel Cabeza, o Juan Manuel García Bermúdez. Incluso acude un edil de la actual corporación, José Antonio Díaz. Entre los asistentes se encuentran trabajadores y ex trabajadores municipales que en su día ocuparon puestos de responsabilidad con Pacheco como Cornelio Vela, Milagros Pérez, José Antonio Carmona, José Luis Zarzana o Francisco Hidalgo; representantes del sector económico y empresarial como Rafael Padilla, Fernando García, Antonio Gálvez, Salvador Pineda o Cristóbal Cantos; y miembros o vinculados a diversos colectivos de la ciudad como Sebastián Peña, Fernando Fernández Gao, Antonio Ordóñez, José Arcas o Andrés Oñate. Francisco Holgado (el conocido como Padre Coraje) y su ex mujer Antonia Castro también participan.

Al finalizar la concentración, que se desarrolla durante media hora, José Rodríguez Carrión actúa de portavoz. Él, que visita habitualmente al ex alcalde los fines de semana, relata el “doble castigo” que ha supuesto el traslado de módulo. Lo resume en una frase con tintes lapidarios: “Un funcionario me dijo hace unos días que ahora Pedro está conociendo lo que es la cárcel”. “Sabemos que Pedro está condenado pero lo que queremos es que la cumpla en las mejores condiciones posibles. Solo pedimos que lo traten igual que cualquier otro preso”, añade.

Mientras tanto, se sigue trabajando en nuevas acciones reivindicativas. Se está a la espera, por ejemplo, de las explicaciones que dé el Ministerio de Interior al traslado tras una pregunta registrada en el Senado por el socialista Francisco González Cabaña y se espera que se realice otra de similares características en el Congreso. Asimismo se está estudiando la posibilidad de llevar el caso al Defensor del Pueblo.

Ahora bien, el ex alcalde disfrutará a partir de mañana de un nuevo permiso, esta vez de seis días, por lo que podrá pasar sus primeras Navidades en familia tras su ingreso en prisión en octubre de 2014.