"Queremos energías renovables, pero de la mejor manera posible"

La Sala Compañía acogió en la tarde de este lunes la presentación del proceso de participación para que Jerez cuente en un plazo de dos años con un plan urbanístico que sirva para regular la implantación de instalaciones de energía renovable en el término municipal. Este acto se encuadra dentro de una primera fase de la elaboración de este documento, cuya redacción se ha encargado a la empresa jerezana Territorio y Ciudad, donde se pretende recabar la opinión de entidades, asociaciones y particulares de cara a elaborar un primer avance de esta futura planificación.  

Ahora bien, y a pesar del elevado número de proyectos ya operativos, autorizados o en tramitación, con la consiguiente repercusión para el paisaje del Marco, la convocatoria apenas fue respaldada. Poco más de una veintena de personas acudieron a este acto donde se explicaron los detalles del proceso de participación que ya se ha puesto en marcha para regular la implantación de este tipo de instalaciones. Eso sí, los asistentes fueron bastante participativos cumpliendo así con el objetivo de esta primera convocatoria para un asunto trascendental para el presente y futuro de la campiña jerezana. Así, se abordaron cuestiones como la necesidad de regular este tipo de instalaciones, la incidencia social y económica sobre el territorio o el impacto ambiental, entre otras.  

Hasta final de año, según explicó el consejero delegado de Territorio y Ciudad, Manuel González Fustegueras, se tienen previsto celebrar una serie de mesas sectoriales para que la redacción de la primera propuesta de ordenamiento, el avance del plan especial, cuente con la mayor participación posible. De este modo, se estima que el avance del plan pueda presentarse a principios del próximo año para que se proceda a su aprobación inicial y posterior exposición pública. Tras esto, se elaborarán los estudios ambientales y se solicitarán los informes sectoriales que este tipo de documento urbanístico requiere. El objetivo no es otro que el documento definitivo entre en vigor en un plazo de dos años, el mismo periodo que se ha establecido de moratoria para la instalación de energías renovables en un radio de 600 metros en torno a los pagos de viñedos. 

Durante el acto, Fustegueras incidió en que Jerez es pionero en este tipo de planeamientos —ya lo fue con el documento para las instalaciones eólicas que está actualmente en vigor— y auguró que será “muy copiado” por otras ciudades y comunidades autónomas. Asimismo, resumió el objetivo de este documento señalando: “Queremos energía renovable, pero de la mejor manera posible”.

Por otro lado, el arquitecto y urbanista comentó que, aunque ya hay numerosos proyectos operativos, en construcción o en tramitación, “nunca es tarde si la dicha es buena”. Además, afirmó que la gran extensión del término municipal jerezano, uno de los más grandes de toda España, hace que, a pesar de que ya hay más de 800 megavatios de potencia instalada, no es el “municipio con más nivel de ocupación”. Sin embargo, incidió en la necesidad de regular su implantación dado que actualmente los promotores buscan reducir sus costes de instalación buscando emplazamientos cercanos a las líneas de evacuación y subestaciones eléctricas ya existentes.  

Por su parte, la alcaldesa, María José García-Pelayo, comentó que “hay que apostar por las energías renovables”, aunque concretando “dónde, cómo y cuánto la queremos”. “Es el momento de parar y reflexionar”, agregó, de ahí que incidiera en la importancia de esta planificación ya que "puede marcar un antes y un después en la definición de nuestro territorio compaginando el desarrollo económico de la ciudad, la protección del paisaje y la sostenibilidad del territorio”.

Actualmente, cualquier proyecto de generación de energía renovable puede construirse en suelo agrario, aunque las instalaciones eólicas sí cuentan con un plan especial específico de hace más de una década, pero que no impidió casos como el de El Barroso que se instalaron aerogeneradores a escasos metros de un paraje de viñas. El futuro plan sustituirá este ordenamiento y establecerá las condiciones no solo para la eólica, sino también para la fotovoltaica, la generación de hidrógeno verde o el almacenamiento, entre otras.