Jerez vuelve a superar la barrera de 63.000 afiliados once años después

Se hunden los contratos, pero se dispara la afiliación. Paradojas del mercado laboral jerezano. Sabido es que noviembre no es un buen mes para el empleo, salvo raras excepciones, como la de este año, en el que las estadísticas de afiliación en alta laboral a último día de mes arrojan un aumento de 1.273 cotizantes y el 2% en términos relativos respecto a octubre. El dato no deja de ser sorprendente en un mes que se saldó además con 300 parados más.

El municipio jerezano vuelve a superar la barrera de 63.000 afiliados a la Seguridad Social once años después de la última vez que lo logró, que curiosamente fue por el mismo mes de noviembre de 2008, cuando se rozaron los 64.600 trabajadores con alta en las listas de Seguridad Social.

Es difícil precisar las causas de tan contradictoria evolución entre los principales indicadores del empleo jerezano –lo lógico sería que la subida del paro y el descenso de la contratación se correspondiera con una bajada de afiliados–, pero es lo que reflejan los datos que elabora el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, en virtud de los que la afiliación también creció en el último año en más de dos mil trabajadores, 2.023 para ser exactos, tras un repunte en este caso del 3,3%.

El aumento mensual obedece al empuje tanto del Régimen General, que gana 276 afiliados respecto a octubre para alcanzar 49.882 en su particular registro, como de los autónomos, que suman 276 cotizantes y establecen su nuevo máximo histórico en 10.272.

Lo mismo ocurre en el acumulado de los doce últimos meses, en los que el Régimen General sube en 1.890 afiliados con alta (+3,93%) , mientras que el colectivo de trabajadores por cuenta propia gana 288 cotizantes (+2,9%).

Por contra, el régimen especial agrario (REASS) y los empleados del hogar despiden noviembre con sendas caídas, aunque moderadas, frente a octubre de apenas cuatro afiliados, en el primero de los casos, y de dos, en el segundo.

En el último año, sin embargo, el REASS pierde cerca de un centenar de cotizantes y el 3,75% en términos relativos, mientras que los trabajadores del servicio doméstico ceden 17 afiliados y el 1,71%.

Frente al empuje de la afiliación, los contratos, que se quedaron en noviembre por debajo de los 9.500, se hunden el 18,6% frente a octubre y el 14,3% respecto al mismo mes de 2018.

El fuerte descenso mensual se extiende entre todas las actividades productivas, aunque con especial incidencia en los servicios, que se hunden un 22% respecto a octubre con cerca de dos mil contrataciones menos. La construcción y la industria ceden entre el 9 y el 10% en el último mes, en la que entre ambos sectores restan 139 contratos, mientras que la agricultura se deja en noviembre un 6,46%, con un centenar casi de contrataciones menos.

En la comparativa interanual, la peor parte se la lleva el sector agrícola, que se deja 785 contratos y el 36% en términos relativos. Los servicios, por su parte, restan de noviembre a noviembre 383 contrataciones (-5,4%), mientras que la construcción baja en 36 altas (-5%). La industria aguanta mejor el tipo en el último año, en el que apenas pierde cuatro contratos y el 0,6%.