Los sindicatos recogerán hoy el listado de afectados por el ERE

Buena parte de la plantilla municipal esperaba ayer expectante y con muchos nervios el encuentro que debía tener lugar a las 9,30 de la mañana entre representantes sindicales y del gobierno municipal, tras ser citados por la alcaldesa, María José García-Pelayo, para ser informados del inicio al Expediente de Regulación de Empleo del Ayuntamiento. En total, serán 300 los empleados que se verán afectados por estos despidos, que se harán efectivos en un mes. Precisamente por ello los sindicatos tenían que acudir ayer a la delegación de Personal, para recoger toda la documentación en la que se incluía también el listado con los nombres de dichos trabajadores.

Durante la reunión, en la calle Caballeros, alrededor de doscientos empleados municipales se concentraron para esperar la salida de los representantes sindicales y conocer su futuro en el Consistorio. "Nos ha echado a la gente encima diciendo que somos unos flojos y no hacemos nada", decía un trabajador a otro, durante la concentración refiriéndose a la alcaldesa. Pese a los nervios, todos esperaban con calma (la procesión iba por dentro) mientras que con cuentagotas llegaban noticias del interior: "Parece que hay problemas porque no hay representación del gobierno y no se van a sentar a negociar", explicaba uno de los concentrados, tras recibir un mensaje de móvil. El tiempo pasaba y tras asomarse por el balcón un representante sindical, confirmando que no había negociación "porque no nos dan los papeles a todos y no está el delegado", una trabajadora estallaba gritando: "¡No se puede tener a la gente sin saber nada, esto es inhumano!", al tiempo que otro gritaba: "¡Si sólo os dan la información a uno, hacedles fotocopias!".

El ambiente se fue caldeando en la puerta de la delegación hasta el punto de que hubo un 'roce' entre empleados y comenzaron a escucharse gritos. Todos los concentrados se volvieron a ver qué ocurría y agentes de la Policía Local se acercaron hasta estos empleados, mientras otro se encargaba de cerrar con llave la puerta de la delegación para evitar problemas. Mientras tanto, periodistas que intentaban grabar lo que ocurría fueron apartados por trabajadores e, incluso, a un cámara de televisión le desenchufaron los cables para evitar que siguiese grabando. "Son los nervios, hombre, no grabéis esto", le decían. Minutos después de este pequeño incidente, la Policía invitó a la prensa a entrar en la delegación para evitar más enfrentamientos.

Tras más de dos horas de reunión, finalmente aparecieron los representantes sindicales de la plantilla para explicar los motivos por los que abandonaban las instalaciones tal como habían llegado: sin ningún documento. La presidenta del comité, Nieves Calvillo (CGT), detalló que la empresa Deloitte (que se encarga de la elaboración del ERE) "sólo ha traído tres copias, una para el presidente de la junta de personal, que son funcionarios y no les afecta y que en ningún lado de la ley dice que tengan que participar ni se les tenga que informar, estamos hablando de datos confidenciales; otro para todas las secciones sindicales para que se lo repartan en cachitos; y otra para la presidenta del comité. Nosotros le hemos pedido que sea al menos una copia por representación sindical, porque la Ley establece que podemos negociar las secciones sindicales y todavía no sabemos cómo va a ser la hipotética mesa de negociación". Tras la negativa a entregar más copias, "el comité ha decidido por mayoría que la presidenta no recoja la que le corresponde al comité porque qué vamos a hacer con ella, son un montón de folios, a color, gráficos porque viene establecidas todas las liquidaciones, nombres... Entonces hemos dicho que esperamos ahí el tiempo que haga falta para que nos lo traiga, pero se ha ido Deloitte, se ha llevado la documentación y nos han dicho que mañana (por hoy viernes) vengamos a recogerlo". Por estos motivos, los representantes sindicales pidieron la comparecencia de la secretaria municipal para que levantase acta de lo ocurrido.

Desde CCOO, Lola Vázquez, quiso también aclarar ayer que el Ayuntamiento da por iniciado el periodo de consultas pero "entendemos desde la representación sindical que lo hace incumpliendo, primero, el principio más básico de buena voluntad y segundo, la normativa". Dicho incumplimiento de la normativa, según los sindicatos, se debe a que Javier Durá "se presenta simplemente como delegado de Recursos, presenta a los trabajadores de Deloitte y se marcha. En ningún momento, a la representación sindical se le ha mostrado documentos que justifiquen que esos señores están capacitados legalmente para ser interlocutores con nosotros y participar del proceso. Primer incumplimiento por parte del Ayuntamiento, no justifica que legalmente que esos señores puedan estar presentes en esta reunión como interlocutores. Podrán estar como asesores". En segundo lugar, Vázquez señaló que se envió una notificación "personal a cada representante sindical como miembro de junta o comité, pero personal, por tanto la documentación relativa al ERE se tiene que entregar personalmente a cada uno de los representantes sindicales y eso lo que el Ayuntamiento no quiere hacer a día de hoy. Y el señor Javier Durá nos ha invado a ir a los tribunales porque cree que esto al final acabará en los tribunales, por lo tanto, incumple también lo más básico que es que en el periodo de consultas se esté negociando".

Por su parte, el representante de CTP, Juan Manuel García Hurtado, hizo hincapié ayer en que "entendemos que el Ayuntamiento está cometiendo un defecto de forma en la tramitación y lógicamente nos vamos a acoger a cualquier defecto que puedan cometer para impugnar el ERE. Es decir, esto no es un pataleo ni un capricho, es una reacción ante una actitud del Ayuntamiento de falta de respeto a todo el mundo, pero además, entendemos que está cometiendo un error y por ahí ya está en manos de los abogados y están estudiando la posibilidad de que sólo en base a eso se impugne el ERE".

Sin embargo, lo cierto es que la decisión (o estrategia) sindical de no recoger ayer la documentación no fue precisamente aplaudida por los empleados municipales que llevan ya más de cinco meses sin dormir preguntándose "¿seré yo?". Quizá por eso o puede que por la imposibilidad de paralizar el ERE, lo cierto es que está previsto que a lo largo del día de hoy los representantes sindicales vuelvan a las dependencias municipales para recoger toda la documentación en la que aparecen los nombres de los empleados incluidos en el ERE. La incógnita ahora es saber quién será finalmente quien comunique estos despidos, ya que los sindicatos advirtieron ayer que esa no es su responsabilidad y que pueden incurrir en un delito por no cumplir con la protección de datos. Desde el gobierno local, mientras tanto, ofrecieron una versión totalmente contraria asegurando que es el comité de empresa el que debe anunciar a los afectados su inclusión en el ERE, al tiempo que dejaron claro que la representación municipal no es necesaria en la negociación al ser la empresa Deloitte quien coordina todo el proceso. Tampoco se sabe si los delegados sindicales dejarán de lado por fin sus rencillas y diferencias, y mostrarán la unidad que tanto le reclama la plantilla, para acudir hoy de manera conjunta a recoger la documentación y tomar las decisiones oportunas para acabar con la agonía de los trabajadores municipales.