Ultimátum de las cooperativas para cambiar las reglas de juego del jerez
Bodegas
Piden un último esfuerzo para zanjar los grandes temas pendientes en manos de la comisión del pliego de condiciones
En caso contrario, plantean disolver el órgano por la falta de avances tras año y medio de negociaciones
Zona de crianza, graneles y fino de Sanlúcar. El sector sigue sin dar con la tecla para resolver las grandes controversias del Marco de Jerez, de las que se hizo cargo la denominada comisión del pliego de condiciones, creada con el propósito de redefinir las reglas de juego de la Denominación de Origen, adaptarlas a la realidad del sector y dar cabida a sus inquietudes. Ni lo uno ni lo otro. El tiempo pasa sin que la macrocomisión creada en el seno del Consejo Regulador encuentre la forma de desbloquear los grandes temas pendientes.
Año y medio después de la constitución de la comisión, y ante la falta de avances en la negociación, las cooperativas del Marco han dado el paso para forzar la convocatoria antes de septiembre de una reunión definitiva de este órgano, en la que o se cierra un acuerdo de consenso o propondrán su disolución sin más.
Ante el enquistamiento de las negociaciones y el "inmovilismo total" de las organizaciones sectoriales, las cooperativas formularon una queja en el turno de ruegos y preguntas del último pleno del Consejo Regulador, celebrado el martes, en la que plantearon a modo de ultimátum la necesidad de tomar una decisión antes de la próxima sesión plenaria, prevista para el último martes de septiembre, cuando se reunirá la comisión.
Hasta entonces, el vocal de las cooperativas, Francisco Lorenzo, entiende que hay plazo suficiente para que las partes mantengan sus contactos y realizar un último esfuerzo. “Y si no hay acuerdo –asegura–, lo mejor es disolver la comisión, que los temas vuelvan al pleno y buscar otras fórmulas, porque esto es una pérdida de tiempo”.
En el pleno, Lorenzo lamentó que las cooperativas hayan sido las únicas que se han movido y que han presentado sus propuestas sobre la mesa, en concreto en la ampliación –ellos prefieren hablar de extensión de los derechos de uso– de la zona de crianza y en la comercialización de graneles.
Sobre la zona de crianza, recuerda que su reivindicación es que las bodegas de la zona de producción, “que cumplen todos los requisitos reglamentarios”, puedan comercializar sus vinos con el sello de la Denominación de Origen. En el tema de los graneles, reclaman la continuidad de los despachos despachos de vino de bodegas y cooperativas, sin entrar en los tabancos, a través de un sistema que garantice la trazabilidad de los vinos para su venta a granel, “una forma de consumo tradicional, que es muy importante y que está muy asentada en la zona”.
Las cooperativas no entran de momento en fino de Sanlúcar, que Fedejerez quiere prohibir limitando su elaboración a Jerez y El Puerto, mientras que el municipio sanluqueño mantendría en exclusiva la manzanilla, pero deja la puerta abierta a apoyar esta propuesta si hay consenso en el resto de temas.
También te puede interesar