La alcaldesa de Jerez confía en una pronta venta de los suelos de las antiguas bodegas de Croft
El desbloqueo de este desarrollo permitirá ejecutar por fin el desdoble del único tramo de la antigua N-IV pendiente
El desdoble de la antigua N-IV en Croft, una historia interminable
La alcaldesa, Mamen Sánchez, ha mostrado su convencimiento de que próximamente podría desbloquearse el desarrollo urbanístico de las antiguas Bodegas de Croft y, por ende, poder concluir el desdoble de la antigua travesía de la N-IV. La regidora ha avanzado este martes que la propietaria de estos suelos, la promotora jerezana Rentas y Vitalicios SL, cuenta con interesados en adquirir estos suelos, que están pendientes de ponerse en carga desde la firma de un convenio urbanístico que permitió su recalificación en 2004.
Sánchez comentó que la Delegación de Urbanismo lleva “meses” en conversaciones con la propietaria de estos suelos para que se termine de ejecutar el acuerdo suscrito hace casi dos décadas. Así, afirmó que la prioridad es que se ejecute el desdoble del único tramo que queda por desdoblar de la hoy denominada avenida Reina Sofía, el comprendido entre las rotondas con la avenida María Auxiliadora y de Lebrija.
Este punto se convierte en un punto de retenciones en los momentos de mayor intensidad de tráfico dado que solo hay un carril por cada sentido. Su desdoble, así como la conclusión de la urbanización tanto de la calle Costa de la Luz como de la avenida de Lebrija quedó inconclusa a pesar de que parte del desarrollo residencial previsto en esta zona se ha llevado a cabo (concretamente, unos suelos situados a espaldas del antiguo complejo bodeguero). La regidora comentó que la empresa está intentando “cerrar un acuerdo” para la venta de los suelos, aunque evitó dar más detalles de la operación alegando que debe ser la empresa quien lo anuncie.
En 2004, el Ayuntamiento y González Byass, entonces propietaria de Bodegas Croft, suscribieron un convenio urbanístico que permitió la recalificación de más de 301.000 metros cuadrados de estos suelos ubicados en la zona noroeste de la ciudad. En 2008, Rentas y Vitalicios adquirió la propiedad. El acuerdo urbanístico contempla la construcción de un máximo de 600 viviendas (a día de hoy ya hay construidas varias promociones). Mientras, parte del antiguo complejo bodeguero (la zona situada junto a la antigua travesía) se destinará a equipamientos. El convenio incluía no solo la ejecución de los viales de este nuevo desarrollo residencial sino también el desdoble de este tramo de la N-IV y la reurbanización de la antigua carretera de Lebrija.
A pesar de que a día de hoy hay entendimiento y predisposición entre el Ayuntamiento y la promotora jerezana para alcanzar un acuerdo que permita desbloquear este desarrollo, no siempre ha sido así. De hecho, el Ayuntamiento inició en 2015 un expediente administrativo por incumplimiento del convenio que acabó en los juzgados.
El TSJA (Tribunal Superior de Justicia de Andalucía) le dio la razón al Ayuntamiento en el incumplimiento del acuerdo por lo que avaló la ejecución subsidiaria del desdoble de la travesía; sin embargo, al emitir las liquidaciones para proceder a este procedimiento, estas también fueron recurridas y los tribunales fallaron a favor de la promotora.
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