"Cada vez hay menos respeto por lo puro, se está dejando de lado"
Soraya Clavijo
La jerezana estrenó con éxito el viernes en Sevilla '6zapatos', un espectáculo en el que ha compartido escenario con La Piñona y Mercedes de Córdoba.

Tras su reciente éxito en los Jueves de Cajasol de Sevilla con '6Zapatos', un espectáculo en el que compartió escenario con La Piñona y Mercedes de Córdoba, Soraya Clavijo mira al frente con ilusión y optimismo a pesar de que es consciente de que no pasan buenos tiempos. A sus 38 años, esta bailaora jerezana, Premio Nacional Carmen Amaya en Córdoba (2004), nos cuenta, en esta etapa de madurez, sus inquietudes artísticas.
-Todas las críticas hablan bien de usted, ¿qué alivio no?
-Sí, la verdad es que estamos muy contentas por cómo ha ido todo, la gente salió muy contenta. Yo hice martinetes y bulería por soleá, dos palos clásicos, y acabé satisfecha.
-Háblenos un poco más de este nuevo espectáculo, '6Zapatos'...
-Bueno, fue una idea que tuvimos un día Mercedes de Córdoba y yo. Estando un día trabajando nos planteamos la posibilidad de montar algo y nos pareció que la mejor bailaora que se adaptaba a nuestra idea era Lucía 'La Piñona', que yo la conozco desde hace tiempo porque la tuve de alumna. Fuimos montando la idea entre las tres y se lo llevamos a Marta Tenorio, de Naranjo Producciones, que terminó de darle forma. Ya después Manuel Herrera, que nos conoce bien, apostó por el proyecto y bueno, afortunadamente, todo ha ido bien. La idea era mostrar el lado más flamenco de cada una y creo que ha gustado.
-Esta es la segunda vez que apuesta por un espectáculo colectivo, en 2014 le vimos en el Festival de Jerez con Lidón Patiño....
-Sí, en la época en la que estamos hace falta unirse porque el trabajo no está demasiado fluido. Creo que hoy en día los artistas debemos estar más unidos que nunca, no nos queda otra. De todas maneras, una siempre aprende de proyectos con más artistas, son experiencias enriquecedoras.
-¿Tan difícil es trabajar sola?
-Es complicado porque además los organizadores de los festivales están ahora en una época en la que sus apuestas principales son proyectos con otras disciplinas como la danza, el flamenco más visceral, más puro se está dejando a un lado.
-Pero si eso ocurre en los grandes certámenes, en los festivales de toda la vida, ¿tampoco hay cabida?
-Sí que los hay pero cada vez menos. Date cuenta que cada vez hay más artistas y así es difícil. Se aprovechan de la situación y quieren darte 1.200 euros para que vayas con un cuadro que tenga, obligatoriamente, dos guitarras y dos cantaores. Así es difícil, por eso espero que esta situación pase pronto.
-¿Y cómo se mantiene un artista hoy en día?
-En mi caso, que tengo dos hijos que mantener, lo hago bailando en los tablaos de Sevilla, que además de estar cotizando y cobrando te sirven para mantenerte en forma. A la vista está que los elencos de artistas de los tablaos de hoy día son extraordinarios, hay un nivelazo y eso también te sirve para seguir aprendiendo. También hago muchos cursos y doy clases, que quieras que no es una fuente de ingreso importante.
-Hubo un tiempo en el que la gente decía aquello de 'siempre quedará Japón'. ¿Ahora ocurre lo mismo?
-Claro que sí, Japón es la salvación de muchos artistas en todos los sentidos. Porque ya no estamos hablando sólo del tema económico, que te ayuda bastante, sino también de otros aspectos. Te pongo un ejemplo. Yo estuve hace unos meses en Japón y para mí el tiempo que estuve allí me devolvió la confianza y la autoestima. En Japón una se siente artista, cosa que aquí en España muchas veces no ocurre. Lo que más me gusta es que te dan tu sitio y no miran de dónde eres, si de Jerez, de Sevilla, de Barcelona o de Toledo, sólo les interesa cómo bailas o cómo cantas.
-Allí sí que se valora el flamenco más de raíz, ¿no?
-Por supuesto, allí se cuida y se respeta lo puro, como yo digo, y además cada vez tienen más conocimiento del cante y del baile, y eso te exige mayor responsabilidad. Si artistas como Marina Heredia, con la importancia que tiene, Dorantes o el mismo Cañizares, van a menudo allí quiere decir algo.
-Y Jerez, ¿sigue siendo Jerez por ahí fuera?
-Eso no se ha perdido y es bueno que sigan saliendo artistas. El secreto de esta tierra es que cierra las puertas a muchas cosas raras, somos así, y quizás ese sea el secreto de que se guarde todavía la esencia. Cuando uno sale fuera Jerez sigue siendo Jerez, y una lo lleva con orgullo. Además, su baile es distinto, porque esa pataíta o ese marcaje como el que hacía Ana Parrilla, con los brazos arriba, no los puede hacer todo el mundo.
-O sea que usted no piensa en hacer otra cosa...
-No, para eso soy muy cabezona, a mí me gusta bailar por derecho y así seguiré, para bien o para mal porque es lo que he hecho desde que tenía 13 años y mi padre me llevó a la academia de baile de Ana María López.
También te puede interesar
Contenido ofrecido por la Ibense 1892