La viña del Marco respira con las ayudas para paliar las pérdidas del covid

Toda ayuda es poco para paliar la falta de rentabilidad del viñedo del Marco en las últimas campañas, pero menos da una piedra. Los viñistas del jerez celebran que la Consejería de Agricultura se haya acordado del sector en la nueva convocatoria de ayudas para sectores afectados por el covid, dotada con 18,1 millones de euros, de los que 5,9 millones se destinan al viñedo y 12,2 millones al equino de cría.

Los titulares de viñas y de explotaciones de equino de cría tienen de plazo desde este viernes 9 de abril hasta el próximo 29 del mismo mes para solicitar las nuevas ayudas, para las que en el caso del viñedo se establece un tope de 7.000 euros a partir de 10 hectáreas.

Estas ayudas, que se financian al 75% con cargo al Fondo Europeo Agrícola y de Desarrollo Rural (Feader), 17,5% con cargo al presupuesto de la Junta de Andalucía y el 7,5% de la Administración General del Estado, vienen a compensar el impacto económico en uno y otro sector debido a la pandemia.

En concreto, la Consejería de Agricultura cifra en 7 millones de euros las pérdidas del sector productor por los 18,4 millones de kilos de uva que no se llegaron a transformar en la última vendimia. La Administración autónomica señala que al inicio de la campaña de 2020, la demanda de uva se resintió de la falta de salida de los vinos, ya que las bodegas tenían los depósitos llenos. En este sentido, prosigue la Junta, al viticultor se le realizaron contratos con un precio de uva similar al de años anteriores, pero al reducirse los volúmenes, ha tenido menos ingresos y un excedente de uva.

El presidente de la asociación de viñistas del Marco de Jerez Asevi-Asaja, Francisco Guerrero, confirma que los viticultores del Marco llevan cuatro años con el mismo precio, entre 36 y 37 céntimos por kilo de uva, con el agravante de que en las dos últimas campañas se han registrado cosechas muy cortas, con un descenso de producción acumulado del 50% respecto a la vendimia de 2018, considerado un año bueno, algo por encima de la media.

Según Guerrero, “las ayudas no son para tirar cohetes, pero sí un alivio” para un sector muy castigado económicamente desde hace mucho tiempo, si bien advierte de la existencia de un problema añadido en el caso de que se presenten más solicitudes de las previstas, ya que el importe de la ayuda se reducirá proporcionalmente.

En las explotaciones equinas de cría, la Covid-19 también ha causado una importante disminución de ingresos, debido fundamentalmente al descenso en la venta de los potros destetados y otro tipo de productos, como consecuencia de la paralización de las actividades en el subsector de servicios y ecuestre (espectáculos ecuestres, festejos populares en los que intervienen los équidos y actividades deportivasequinas, entre otros). Las pérdidas en este sector durante 2020 por estos conceptos se estiman en casi 24 millones de euros.

La Junta señala en un comunicado que estas ayudas se caracterizan por su “eficacia y agilidad en la tramitación”, al tiempo que destaca que con esta medida “vuelve a dar respuesta a sectores especialmente damnificados por la pandemia a través de la medida 21 del Programa de Desarrollo Rural (PDR), para lo que cuenta con la autorización explícita de la Unión Europea”.

Hay que recordar que la Consejería de Agricultura ya ha resuelto y pagado más de 31 millones de euros en ayudas para atender las solicitudes correspondientes a los sectores de la flor cortada y planta ornamental, bovino de orientación cárnica y de otra orientación, ovino y caprino, porcino ibérico, así como a bodegas de vino, secaderos de jamones, paletas y embutidos y a centros de manipulación de flores y plantas ornamentales.