Ensayos antes del primer Gran Premio

Jerez/El 26 de abril de 1987 comenzó a escribirse la historia del Circuito de Jerez en el Mundial de velocidad, matrimonio que ha llegado hasta nuestros días con los lazos fortalecidos por el paso del tiempo aunque este fin de semana no vaya a disputarse el Gran Premio de España por culpa del coronavirus. Y antes de la primera prueba del Campeonato del Mundo en Jerez, en aquel año 87 el trazado albergó dos pruebas que sirvieron como banco de pruebas para su estreno mundial, primero una carrera del Campeonato de España en febrero y luego una del Campeonato de Europa en marzo. En este reportaje se recuerdan, a través de la hemeroteca de Diario de Jerez, ambas citas, en las que el Circuito calentó motores y se puso a punto para su puesta de largo con el Gran Premio de España.

En fechas previas se detallaba que con la creación del Circuito de Velocidad se fundó también el Club Motor Jerez, imprescindible al delegar las federaciones nacionales (automovilismo y motociclismo) la organización de las pruebas en los clubes, no en los circuitos. Fernando Cantador, coordinador de las pruebas deportivas y portavoz del club entonces, explicaba que en noviembre de 1986 se realizaron todos los trámites, aceptados por el Consejo Superior de Deportes, con lo que todas las competiciones en el nuevo trazado jerezano las organizaba el Club Motor Jerez (salvo el Mundial de F-1): el Campeonato de España de velocidad previsto para el 15 de febrero de 1987 y el Campeonato de Europa de 80, 125, 250 y 500 el 15 de marzo, dos pruebas de motos antes del primer Gran Premio de España, la puesta de largo de Jerez y su circuito en el Mundial de motociclismo.

Así, el 15 de febrero, dos meses y pico antes del Mundial, el trazado jerezano albergaba la segunda prueba puntuable para el Campeonato de España de velocidad con pilotos mundialistas de la talla de 'Aspar', 'Champi' Herreros, Julián Miralles, Luis Miguel Reyes y Álex Crivillé -al que entonces se le conocía como 'Crevillet' por estos lares-, y la prensa se hacía eco de la importancia de la prueba:

"El Club Motor Jerez y Cirjesa, tienen mucho que decir en esta organización ya que será casi un ensayo general para el Mundial de Motociclismo que se celebrará en abril. En esta ocasión el Gran Premio de España de Velocidad viene a Jerez y esperemos que se quede por muchos años, y ahí es donde va a estar el mérito más importante de la organización". Toda una premonición, sin duda, porque al quedar Assen fuera del calendario de este año, si Jerez alberga carrera en 2020 se convertirá en el circuito con la mayor racha activa de Grandes Premios consecutivos en el calendario del Mundial.

Y la prueba del Campeonato de España arrancó con el triunfo de Bravo en la carrera de F-2: "Justo a su hora se dio la salida a la primera de las pruebas de la reunión, que colocaba en la parrilla de salida a 27 pilotos. Por delante 12 vueltas a la pista y los primeros de la parrilla de salida copando las posiciones adelantadas. Ernesto Castellar, que ocupara la tercera plaza en entrenamiento, hace una salida floja, en cuarta posición, y a partir de la segunda vuelta toma la segunda plaza. Pasa en primera posición en la novena, vuelve a la segunda en la décima, pasa en tercera posición en la penúltima y un fallo en su motor le hace quedar en decimocuarta posición. Bravo, que salió en primera posición, se ve relegado a la tercera plaza durante siete vueltas, toma la segunda en la novena, la cabeza en la décima y termina vencedor. Es el primer podio de la mañana”.

Luego, triunfo de Antonio García en el cómputo de las dos mangas de Superbike, con segundo puesto para un por aquel entonces prometedor Alberto Puig: "En orden cronológico, se dio la salida a la primera manga de Superbikes, después de la de F-2, aunque la prueba no se decidió hasta las 15:15 en que terminó la segunda manga. En la primera de ellas ya queda reseñada la caída de Cavestany, que a pesar de tener la moto en bastantes malas condiciones volvió a salir y ganó la segunda manga con cierta autoridad y sin arriesgar demasiado. 28 pilotos en la primera y 26 en la segunda corrieron buscando los puestos de cabeza".

La jornada avanzó con la victoria de Sánchez Marín en la prueba de 125cc, que "se corrió a 12 vueltas. Los tres primeros clasificados en la parrilla tomaron la cabeza, de salida, aunque por distinto orden ya que Sánchez Marín tomó la cabeza de la prueba y poco a poco fue adquiriendo la suficiente ventaja -diez segundos- como para terminar la prueba con absoluta tranquilidad. Fernando González de Nicolás consiguió meterse en la tercera posición en carrera, durante las cuatro primeras vueltas, bajando después a la quinta posición y terminando finalmente cuarto. De todas formas, la diferencia entre el segundo y el tercero fue de 30 segundos, lo que significa casi un kilómetro en distancia".

Y el cuadro de honor de la carrera del Campeonato de España lo cerró Jorge Martínez Salvadores, el Aspardenyer del motociclismo español, en 80cc: "La prueba reina de la mañana reunía al campeón y subcampeón del mundo de la cilindrada. Ambos, con motos Derbi, y ganas de estar en cabeza. De salida fue Miralles el que tomó la cabeza, y al paso por meta en la prinera vuelta iba seguido de Luis Miguel Reyes, de 'Aspar' y de Félix Rodríguez, dejando la quinta plaza para 'Champi'. De inmediato, toma la cabeza 'Aspar' para el resto de las 11 vueltas que quedaban y no puede despegarse de Reyes, que se pone a su cola y le sigue hasta el final. 'Champi' ocupa la tercera posición desde la cuarta vuelta, y con esos puntos continúa en cabeza del Campeonato de España".

Campeonato de Europa

Jerez sacó nota en la prueba del Nacional y un mes después subió el listón. Con casi 200 pilotos en liza -entre ellos Torrontegui, Dani Amatriain, Marco Papa, Miralles, Crivillé y Alberto Puig -y la participación de los jerezanos Alberto Fernández en 80cc y Manuel Coro en 500cc (con una Yamaha de 350cc)-, el 15 de marzo se celebró la carrera del Europeo de velocidad, antesala del primer Gran Premio del Mundial de motociclismo en Jerez.

Era la primera carrera del calendario continental y en los entrenamientos los pilotos españoles y locales dieron el callo, tal y como se reflejó en las páginas del Diario: "Destacar en esta prueba (500cc) la actuación del jerezano Manuel Coro, que con una moto de 350, prácticamente de calle, ha conseguido un excelente tiempo y ha sido la primera Yamaha clasificada, y en esa posición ha quedado en la parrilla de salida, aunque en posiciones no demasiado ventajosas si se tiene en cuenta la calidad del resto de las máquinas. Lo importante para el jerezano es terminar, que los aficionados sepan que está ahí, y el conseguir un puesto de honor, con la máquina que tiene actualmente, es prácticamente imposible".

Miralles, Crivillé y Félix Rodríguez coparon una primera línea de parrilla española en 80cc, cilindrada en la que "a pesar de los pesares, ahí está también un piloto jerezano, Alberto Fernández, ocupando la vigésimo novena posición, con su Minarelli e intentando ser alguien en este mundo del motociclismo de velocidad. Le está costando horrores, pero a base de tesón y esfuerzo intenta demostrar que con mejores medios sería un hombre puntero. Ojalá lo consiga".

En 250cc comenzaba a despuntar el ahora jefe de equipo del Repsol Honda Team: "En esta cilindrada, la más numerosa en participación, habría que destacar especialmente la actuación de Alberto Puig, un 'novato' casi en el mundo de las motos que ha sabido estar a la altura de los mejores y ha conseguido colarse en el puesto 8º, lo que no está nada mal para empezar, sobre todo porque en las tandas de entrenos Cavestany y él han rodado en plan de equipo y esa no es la manera de hacer los mejores tiempos. Para atrás se mira si se va el primero, pero en todo caso, el de delante jamás puede doblar a un piloto si las cosas se hacen bien. Habrá que esperar, de los dos, mejores resultados" en las carreras.

La crónica de las carreras destacaba lo que se iría convirtiendo en un hábito con el paso del tiempo, ver a los pilotos españoles en el podio de Jerez: "La jornada deportiva de ayer en el circuito jerezano fue casi totalmente victoriosa para los pilotos españoles, aunque falló la cilindrada de 500cc donde se podía haber hecho podio".

"Se inició la reunión con la prueba de 125cc, que se disputaba a 17 vueltas" y en la que destacó "la actuación de 'Nani' Nicolás, que con un monocilíndrico se codeó con los mejores".

La segunda prueba de la mañana "fue la de 500cc, en la que se esperaba una buena clasificación del español Dani Amatriain, pero aunque la tuvo, no la que se esperaba, ya que fue tercero durante bastante tiempo y un golpe en su rodilla le hizo perder posiciones. En esta carrera habría que tener en cuenta la actuación del jerezano Manuel Coro, que con una Yamaha de serie prácticamente terminó la prueba por delante de máquinas más potentes que la suya".

Miralles y Crivillé cumplieron los pronósticos: "La prueba de 80cc despertaba la expectación de los aficionados ya que en la parrilla de salida se habían colocado tres pilotos españoles en las primeras posiciones. Podía ser un festival nacional y a punto estuvo de serlo, de no haber roto -una avería estúpida- Félix Rodríguez, que hubo de retirarse. A la hora de la verdad las 12 vueltas fueron una paseo para el equipo de Derbi-FEM (Federación Española), que sin apretar en absoluto se pusieron por delante cuando y como quisieron y se mostraron intratables. El jerezano Alberto Fernández, Minarelli, se clasificó en vigésimo cuarta posición”.

Cerraba la mañana la prueba de 250cc "con una nutrida participación española y la esperanza puesta en Javier Cardelús, que en entrenos había hecho un segundo mejor tiempo. Se inició la carrera con el español en cabeza, pero a la cuarta vuelta fue superado y pasó a la tercera posición y allí continuó hasta la vuelta 14, en que pasa a ocupar la segunda plaza, y a partir de la vuelta 16 no deja la cabeza".

Y al mes siguiente, Jerez comenzó su idilio con el Mundial, este fin de semana aparcado por el COVID-19.