Jerez Íntimo
Marco Antonio Velo
De Jerez a San Fernando: un abuelo habla con su nieto
La otra mirada
Jerez/SIN duda un año más el Festival de Jerez ha supuesto todo un éxito, que le vuelve a consolidar como evento cultural de primer orden en la ciudad. Al igual que se van consolidando las manifestaciones fotográficas que le acompañan. Aunque terminado el período oficial de celebración del mismo, aún podemos disfrutar de al menos tres de las exposiciones fotográficas que le han seguido a compás.
La Galería Sánchez de Lamadrid mantiene hasta el 23 de mayo la colección de Steve Kahn (Los Ángeles, 1943) ‘Being there...’. El trabajo documental de Kahn nos ofrece la visión de un americano que con 23 años llega a Morón de la Frontera poderosamente atraído por una grabación de Diego del Gastor llegada a sus oídos mientras realizaba estudios de guitarra clásica en Estados Unidos. El californiano dejaría con su cámara un testimonio de excepción sobre la vida del flamenco entre 1967 y 1969, del que la Galería Lamadrid nos muestra una selección de doce fotos con la calidad y criterio que conforman sus señas de identidad.
Otra de las exposiciones que han complementado fotográficamente el Festival es ‘Malvaloca’ de Francisco Javier Ramírez ‘Cachi’, en el local de los Baños Árabes de la calle El Salvador, y que permanecerá abierta hasta el 31 de marzo. Las imágenes de ‘Cachi’ son fragmentos, pedazos, retazos de distintos aspectos que conforman el conglomerado mundo del flamenco, y que consigue despertar en el autor una amalgama de sensaciones, trasladando a cada fotografía parte de sí mismo y de ese mundo de recuerdos que desde niño le acompañan en su barrio de Santiago.
‘Malvaloca. Flamenco libre’, viene a ser eso, un ejercicio anárquico de exteriorización de emociones del autor, pero sentido desde sus raíces, desde sus adentro. En el que como bien define Manolo Naranjo en el prólogo: “En colores sonoros suspendidos, oyen los ojos, miran los oídos…”
Y por último, no quiero olvidar la espectacular exposición de nuestro admirado compañero Miguel Ángel González, que por supuesto ha cubierto el Festival con el sello que le caracteriza, pero que nos ha demostrado que su fotografía puede ir y va más allá, como magistralmente lo ha hecho en ‘Danza, Amor, Sometimiento’ que hasta el 30 de marzo se exhibe, o más bien se siente, en Espacio de la Calle de c/ Santo Domingo 7 duplicado
También te puede interesar
Lo último
No hay comentarios