El festival Villa de Monda y el de Marchena, destinos veraniegos para Manuela Carpio

Que festivales flamencos como el de Marchena, con casi medio siglo de vida a sus espaldas, y el de Monda, con 26 años, apuesten por el baile racial es, sin duda, una buena noticia para el flamenco, que conserva en la persona de Manuela Carpio a uno de sus grandes tesoros.

La bailaora jerezana prepara estos días su aparición en estos dos importantes festivales veraniegos de Andalucía, el de Monda, con un enclave, situado en la misma Sierra de las Nieves, de ensueño, y el de Marchena.

Fiel a su filosofía y a su gente, Manuela se rodeará para estas dos importantes citas de su habitual elenco artístico, ese en el que encontramos voces poderosas como las de Enrique El Extremeño, Manuel Tañé, Miguel Lavi y el joven Iván de la Manuela, la guitarra de Juan Diego Mateos o la espontaneidad y el arraigo de El Torombo.

Con esta particular tropa, la jerezana llegará hasta Málaga el próximo sábado, un festival, el de Villa de Monda, que suele acoger con especial entusiasmo a los artistas de Jerez, no en vano el pasado año pasaron por allí la Familia Mijita.

Monda servirá de aperitivo a la artista para actuar el día 29 de julio en el Festival Flamenco de Marchena, que cumple este año 49 ediciones, y donde compartirá cartel con el maestro José de la Tomasa, Rubito hijo y Rafael de Utrera.

Su última gran cita estival será en la Fiesta de la Bulería el próximo 19 de agosto,