El blues vuelve a casa

Un sueño cumplido y fraguado desde hace tres años. El blues vuelve a casa. La Isla del Blues, el veterano festival que naciera en San Fernando, allá, en el verano del 97, regresa al parque Almirante Laulhé donde, hace ya la friolera de diecisiete años, Zachary Zach Prather asombrara al respetable dejando al descubierto las múltiples coincidencias entre dos músicas del alma como el blues y el flamenco. Así recuerda aquella primera edición del festival José Peinado, arquitecto de esta cita, ojeador infalible de talentos, que el próximo 16 de agosto verá su anhelo hecho realidad. La vuelta de La Isla del Blues a su Isla natal tras siete años en Cádiz y uno, la XV edición, en barbecho.

"La verdad es que sí, esta vuelta a los orígenes es un sueño cumplido. A ver si recuperamos el festival donde lo dejamos aquí porque la gente venía en masa al parque para escuchar nuestras propuestas. Luego, en Cádiz, tuvimos años buenos en el Teatro Pemán pero cuando lo cerraron, y tuvimos que ir al Baluarte, la cosa bajó un poco porque, quizás, no era el lugar idóneo para que nuestro público, que es más maduro, aguantara en pie cuatro o cinco horas de música", explica Peinado al que no se le olvida la octava edición del encuentro, la última que se celebró en San Fernando, "con 1.800 espectadores" y un espectáculo "digno de ver y recordar".

Tampoco va mal encaminada esta XVII edición que Peinado bautiza como "una auténtica noche de las guitarras". Y al del ojo y oído clínico es aconsejable hacerle caso. Cuatro "monstruos" de las guitarras, dos chicos y dos chicas, se lanzarán a la conquista de La Isla del Blues. Como siempre, artista internacionales y nacionales.

En este caso, reina en el cartel la gran esperanza blanca de la guitarra británica, un verdadero "príncipe del blues", Oli Brown, un talentoso artista de blues rock con dos discos editados, múltiples British Blues Awards a sus espaldas como músico y cantante, que llega a la cita tras aunar fuerzas con "dos locomotoras" del género como el bajista Samuel Weston y el batería Kevin Hickman. Oli Brown & RavenEye, así se llama la banda y así se llama su disco juntos, un trabajo de influencias rockeras con el que han sido teloneros de la gira por España de toda una leyenda como Joe Satriani. "De todas formas, en el concierto harán un 50% de blues y otro 50% con el nuevo disco", adelanta Peinado.

Vargas Blues Band & Dani Wilde, prosigue el delicioso cartel. Poco se puede añadir, que no se haya dicho ya, de la banda de blues más internacional de España. Javier Vargas, que ha actuado con otros tótems como Carlos Santana o B.B. King, "nunca ha estado en el festival y nunca ha tocado en San Fernando", explica Peinado que salda, contentísimo, la deuda este año. Y de qué manera. Porque con Vargas y los suyos viene la británica Dani Wilde, una gozada de intérprete que marida el soul y el blues de una forma inusitada. "Seguro que el público se va a sorprender con esta propuesta conjunta. Son buenísimos", recomienda.

Las alabanzas tampoco se agotan para el buen hacer de Susan Santos, la blueswoman por excelencia de nuestro país, que llega con nuevo disco editado este mismo año, Electric Love. "Es la segunda vez que viene al festival donde ya tocó hace cuatro o cinco años, pero es que la gente me preguntaba por ella y me pedía que volvería, y yo, encantado, es estupenda", se congratula José Peinado que ha sacado adelante una nueva edición de La Isla del Blues "con la gran colaboración del Ayuntamiento de San Fernando".