La importancia del arte de las hermandades

Una buena parte del peso de las Hermandades que hacen su estación de penitencia en Semana Santa recae en el arte. Sí, en lo artístico, porque es el único medio físico por el que tienen razón de ser. Existen porque hay esculturas de carácter devocional que procesionan, que reciben culto y que son epicentros de veneración popular, al margen de la importante labor social que llevan a cabo.

Por tanto, las personas responsables de gestionar una Hermandad, deben contar con criterios de expertos en arte para ampliar su patrimonio o en caso de ser relativamente nueva, contratar imágenes titulares que estén a la altura de lo que se exige en términos de calidad, autenticidad y originalidad artística, para que sean capaces de aportar valor al contexto al que pertenecen.

Hemos visto cómo las modas han hecho que en muchísimas ocasiones las imágenes titulares de las Hermandades se hayan retocado o sustituido por otras, con poco criterio, sin tener en cuenta el valor patrimonial. Pero claro, antes no había tanta información como ahora. Ahora gracias a las redes sociales “todo se sabe” y “todo se denuncia”.

Se nos olvida que las grandes esculturas de la Semana Santa andaluza son buenas porque pasaron por un exhaustivo control de calidad, el artista tenía que esforzarse para poder comer de su trabajo. Hoy es al revés, nos tenemos que adaptar a su estética personal y criterio de lo que es bueno. Y esa diferencia de concepto viene dada en muchos casos por el precio de la obra. Da la impresión que algunas Hermandades deciden “echarse a andar” con imágenes de bajo coste que con el tiempo tienen pensado cambiar.

Creo que toda Hermandad que procesiona en Semana Santa debe invertir en titulares con calidad técnica y artística para seguir creciendo. Como diría el refrán ‘Despacio y buena letra’.