José Manuel Moreno Arana

Una nueva atribución a Ignacio López

29 de octubre 2024 - 03:04

El pasado martes 22 de octubre presentamos en la parroquia de San Marcos una propuesta de autoría para la imagen de Santa María de la Paz y Concordia en sus misterios dolorosos dentro de una conferencia que fue pronunciada junto a Manuel Cobo Carrasco con motivo de la restauración acometida sobre la misma por este último. En esta charla se planteó la hipótesis de que el autor de esta talla fuera Ignacio López, escultor de origen sevillano y activo en El Puerto de Santa María entre 1680 y 1718. Un artista que hemos estudiado en múltiples ocasiones desde que en 2006 se lograra redescubrirlo para la historia del arte provincial y andaluz. Desde la ciudad vecina pudo recibir relevantes encargos para Jerez. Pero en este caso estamos hablando de una obra artística incorporada de manera reciente al patrimonio jerezano, en concreto en 1981, cuando José Soto Palas la dona a la hermandad de la Cena tras adquirirla a las Capuchinas de El Puerto.

A día de hoy no hay datos seguros sobre su origen, debiendo resaltarse además que ha sufrido diversas intervenciones que han ido desdibujando sus rasgos. No obstante, los detalles anatómicos que han permanecido intactos, cuello y orejas, nos remiten al estilo de López.

Por otro lado, sugerimos identificarla con una dolorosa perdida de este escultor: la Virgen de las Lágrimas de la cofradía del Dulce Nombre, radicada en el convento portuense de Santo Domingo. Contratada en 1683 por el imaginero, era de candelero, cedro y tamaño natural, como la actual Paz y Concordia. Aunque se le pierde el rastro a partir de la Desamortización de 1835, tras el cierre del cenobio dominico pudo acabar trasladándose al convento de las Capuchinas. Una posibilidad aún sin confirmar documentalmente, expuesta con las debidas cautelas y que futuras investigaciones deberán confirmar o descartar.

stats