Una pausa en la canícula

Con la evidente sensación de náuseas que me ha provocado el descarado intento de blanqueamiento de la banda terrorista ETA, coincidiendo con el triste aniversario del vil asesinato del joven concejal del Partido Popular, Miguel Ángel Blanco, cuyo "delito" por lo visto fue el de alinearse en las filas de una formación política de derechas; paradigma al parecer de todos los males del universo para todos aquellos que no comparten sus ideas; inicio la redacción de este dominical artículo para Diario de Jerez, último por ahora hasta que llegue el mes de septiembre, que necesario es aprovechar el verano para poner las ideas en orden y sobre todo para tratar de disfrutar de unas semanas de descanso, naturalmente contando con la benevolencia del director de la publicación, tras todo un largo período en que puntualmente he comparecido, domingo tras domingo, en estas páginas para manifestar mis ideas sobre multitud de asuntos locales o de cualquier otro ámbito…

Es decir que, ante la canícula y los incendios, muchos de ellos provocados por personajes viles y cobardes, que no tienen otra forma de proceder que haciendo daño, lo mejor es hacer pausa, retirarse a los 'cuarteles de invierno' y aguardar la llegada de una climatología más benigna, que no suponga una amenaza cierta para la salud, especialmente para quienes ya estamos incluidos en nuestro sistema de Salud oficial, por edad, en el segmento poblacional de "personas de riesgo" …

Así es que necesaria pausa, en este tiempo de auténtica canícula, en el que hasta algunas jóvenes ministras, alineadas en la "siniestra", se marchan al paraíso de la democracia, que siempre se ha dicho así de los Estados Unidos, es decir de la "diestra" y en el que se aventura ya el verdadero "tropezón" de la economía en el venidero otoño, del que nos vienen avisando todos los signos que denotan que esta política del parcheo emprendida por nuestros gobernantes, con regalías de transportes, complementos salariales de todo tipo y cuanto haga falta en la política del "gratis total", sin exigir nada a cambio, nos lleva - así lo señalan todos los indicios - a la ruina…

Mientras tanto, además, observe usted cómo suben los precios de los alimentos de primera necesidad, no digamos los del carburante o el gas y también el butano, como consecuencia del conflicto de Ucrania; en el que muchos de nuestros ilustres representantes de la mas recalcitrante izquierda siguen alineados con el señor Putin, cuyos argumentos aplauden con entusiasmo; sin que el gobierno de España haya sido capaz de ponerle coto al alza imparable de los mismos a pesar de la "euro ministra" responsable de nuestra economía…

Así que aguardando el final del "chaparrón" canicular, esperando que amaine sobre todo el puñetero levante, lo mejor es bajarse aquí del metro ese que alguna anterior alcaldesa soñó para Jerez y nunca tuvimos, y esperar la llegada del otoño, salvo que la actualidad demande otra cosa…