Pepe Marín

La recuperación de un gran concierto navideño en la Catedral

Opinión

29 de diciembre 2024 - 03:06

Fue en el 2013 cuando el primer templo jerezano abrió su gran puerta central a fin de dar entrada a cientos de personas -más de 800 según los datos reseñados en prensa-, ávidas de presenciar el anunciado Concierto Navideño a beneficio de Cáritas Diocesana. No asistí en aquella ocasión ni había tenido oportunidad de visibilizar el desarrollo del mismo hasta que, el pasado martes, 24, día de Nochebuena pude gozar de su desarrollo gracias a la reemisión del mismo a través de Canal Sur. Me resulta imposible retener el número de villancicos -algunos serán reseñados al final-, captados por cámaras y micrófonos de la televisión andaluza, cada uno de ellos para tres voces cantaoras como son las de Tomasa ‘La Macanita’, Jesús Méndez y Felipa del Moreno -esta última configurando al tiempo con Estefanía Zarzana y Tomasa Peña –éstas con sus breves intervenciones-, el coro femenino de voces y palmas-; la guitarra siempre hermosa de Manuel Valencia conquistó el espacio escénico, sin adornos innecesarios, luciendo con la elegancia que le acredita para el justo y brillante ejercicio flamenco de los protagonistas del cante y toque.

Lo expuesto bastaría para la reseña de una cita más de las numerosas que se vienen celebrando cada año en Jerez respondiendo a la denominación de zambombas. Lo ofrecido en el templo catedralicio estuvo lejos de una manifestación como las brindadas en plazas, peñas y asociaciones, cada una de estas cumpliendo con lo previsto y programado con la mejor voluntad; otra cosa es la masificación que suele respaldarlas convirtiéndolas en espectáculos alejados de su origen: zambomba.

Lo que los telespectadores pudimos contemplar el martes fue algo distinto: un concierto de villancicos cantados con gran rigor sin pérdida de espontaneidad con una guitarra pletórica y tres palmeros de primera división: Manuel Soto ‘El Bo’ -q.e.p.d.-, ‘Chicharito’ y ‘El Macano’; como era lógico presuponer, al final los tres dejaron sus bailes cortitos-, por bulerías. La percusión estuvo a cargo de Perico Navarro. Piano, violines y otros instrumentos orquestales constituyeron respaldos brillantes plenos de acierto.

Si Tomasa -guapa y elegantísima- derrochó durante su intervención la jondura que atesora su voz, Jesús Méndez -elegantísimo asímismo-, dejó claro de principio a fin su sabor plazuelero, especialmente -para mi gozo- con ‘Los campanilleros’. Los caminos se hicieron, Calle de San Francisco, Tin, tin Catalina, Nana de Jerez, Nana de Belén y así hasta el final, fue el mejor de los racimos de coplas y villancicos que pudimos oír en la reemisión televisiva que Canal Sur ofreció en la tarde del día de Nochebuena.

Quiero dejar constancia de mi sincero agradecimiento a los trabajos aparecidos en las páginas de este periódico los días 4 y 10 de diciembre de 2013, Francisco Pereira y J.P.Lobato respectivamente -previa y comentario final-, gracias a los cuales he podido completar este comentario sobre el Concierto de Navidad que, a beneficio de Cáritas Diocesana fue ofrecido en el primer templo jerezano, la Santa Iglesia Catedral. A cuantos han sido protagonistas, colaboradores y sean finalmente lectores de este comentario, el deseo ferviente de un venidero y próximo 2025 pleno de salud, trabajo y vivienda para todos… y mucha felicidad.

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