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Vaya por delante que soy un amante del deporte, dicho lo cual es fácil entender que cualquier actividad deportiva de élite que se dispute en Jerez me llena de alegría. Es más, yo fui a la calle Arcos siendo un jovencito para ver pasar a Álvaro Pino en aquella contrarreloj que terminaba en la Porvera. Años después tuve la oportunidad y la suerte de entrevistar a Miguel Induráin en plena avenida Álvaro Domecq. Es decir, bienvenida sea la Vuelta.
Pero si ahondamos un poco más en la cuestión, digamos que le damos otra vuelta de tuerca, descubres la miserias políticas. Si a alguien le apetece remover la hemeroteca descubrirá cómo las declaraciones de los políticos efímeros de turno vuelven a repetir los mismos discursos de hace 10, 20 o 30 años. Que Jerez se sitúa como capital mundial del deporte. ¿Qué capital mundial , por favor? Que está bien, vale, lo compro, pero ¿capital mundial de qué, por favor?
Si damos otra vueltecita más de tuerca, al politiquillo de turno le da por hacer valoraciones económicas, por supuesto siempre positivas y muy positivas. La cuestión es que todas esas cifras no vienen acompañadas de ningún estudio riguroso y creíble que lo avale. Yo soy el concejal de turno o la alcaldesa de turno y eso es lo que hay. De esto que hablo puedo contar alguna que otra anécdota, por ejemplo vinculada al circuito de Jerez o a la Feria del Caballo, pero no es el caso.
Sigamos dándole otra vueltecita más de tuerca. Menos mal que en esta edición la vuelta ha pasado por mi calle. Lo siento por lo de las calles de al lado. Más aún por lo de las barriadas cercanas. También por el resto de Jerez y sus pedanías. Lo siento por todos, pero después de no se cuanto tiempo han vuelto a pintar los pasos de peatones y las líneas de mi calle. Así que viva la Vuelta. Ya solo me resta rezar para que cuanto antes vuelva a pasar la vuelta por mi casa.
Por cierto, ya por seguir dándole una vuelta de tuerca a la historia, me ha encantado el buen seguimiento que ha tenido la Vuelta en los medios locales, con todos sus anuncios divulgativos y demás. Todo sea por Jerez y su pueblo ¡Qué nos gusta una vuelta!
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