West Side Story

Nueva York, 1957. Dos grupos de jóvenes, uno puertorriqueños y otro nacido en la ciudad, se disputan el dominio del barrio. Son las bandas los “Jets” blancos y los “Sharks” latinos. Vi la película varias veces, y hasta que no la vi, en el antiguo Cine Ribas, en versión original, no comprendí el problema de la emigración. A groso modo, hoy son los emigrantes latinos y los emigrantes europeos no latinos. La división, se ha evidenciado en las elecciones de días pasados. Los ricos, ricos, han encabezado en los estados de mayor mano de obra agrícola, e industrial, han elegido republicano, y los ricos funcionarios, con carreras, y ricos de las grandes universidades han elegido a los demócratas.

El millonario Donald Trump ha ganado, junto al millonario Elom Musk. Éste último un mes antes, publicó en sus super medios, como el ahora llamado “X”, 3.000 tuits en favor de Trump. Rifó miles de dólares entre los que dijeron que iban a votar al republicabo Trump. La asociación del rifle está contenta. Las iglesias pentecostales afirman que “dios” lo salvó del disparo para que salvara a América.

En el libro del Éxodo se narra la travesía del pueblo esclavo en Israel de la tiranía egipcia por el desierto. Cuando hubo escasez de agua y comida dijeron, poco más o menos,” …éramos esclavos, pero al menos comíamos de balde pan hasta saciarnos… ollas de carne, pepinos, melones…”.

El pueblo egipcio prefirió comer, saciarse de balde, antes que la libertad.