
Alto y claro
José Antonio Carrizosa
¿Nos lavamos más las manos?
EL día 15 de marzo de 1925 se reúnen en cabildo general, por primera vez en la Capilla de Nuestra Señora del Refugio de los Desamparados, los veintiún hermanos fieles que todavía conservaba la hermandad de la Coronación de Espinas después de la travesía en el desierto provocada por el cierre de la iglesia de San Agustín.
El último cabildo se había celebrado en esa iglesia en la cuaresma de 1913 para decidir no hacer estación de penitencia ese año. Después vino la clausura por riesgo de ruina hasta que en diciembre de 1920 se derrumba la bóveda central y se trasladan las imágenes a dependencias de la Colegial, no llegándose a poner allí al culto.
Antes del derrumbe, se pide en 1918 a la autoridad eclesiástica el cambio de sede canónica a la inmediata parroquia de San Miguel, que no tenía hermandad de penitencia en ese momento. Esta petición obtiene la aprobación del párroco y la del arcipreste de la ciudad. Enviada la consulta a Sevilla se le pierde la pista al asunto. Otros destinos mayores se le tenían guardados a la corporación cuando la Iglesia le concede la capilla de los Desamparados en el extremo de la ciudad yendo hacia Arcos con el fin de evangelizar aquella zona.
De esta manera, en julio de 1924 comienzan a trasladarse los enseres a la nueva capilla y a repararse una fábrica muy maltrecha por años de abandono ‘pues llevaba más de 12 años de estar cerrada al culto y tan desamparada cual el nombre que su titular expresa’.
En este cabildo, podríamos decir reorganizador, se elige junta de gobierno después de 12 años de inactividad de la que sale como ‘Hermano Mayor Prioste Don Juan López Andrade’.
Se decide celebrar el tradicional Triduo que fue predicado por el R.P. carmelita Fray Luis María Llop y amenizado musicalmente por la Schola Cantorum que interpretó versículos del Miserere de Eslava así como otras composiciones. La crónica de prensa resalta que ‘antes de empezar los cultos y al terminar estos, quemáronse desde la torre de la pequeña iglesia, gran cantidad de cohetes’.
También se decidió la salida de la Cofradía en procesión de penitencia, curiosamente, el Lunes Santo 6 de abril a las siete y media de la tarde. Esto debido, con toda seguridad, a que ya se había reorganizado la hermandad de las Angustias que había ocupado su lugar habitual del Domingo de Ramos y a la búsqueda de mayor protagonismo. Sin embargo, al año siguiente se recupera el Domingo de Ramos como día de salida que ya tenía establecida la Hermandad desde la reorganización de 1896.
El recorrido escogido es: Arcos, Medina, Santísima Trinidad, Alameda de las Angustias lado de dicha Iglesia, Cánovas del Castillo (hoy Corredera), Pedro Alonso, Ángel Mayo (hoy Caballeros), Alfonso XII (hoy Arenal), Lanceria, Duque de Almodóvar (hoy Larga), Marqués de Mochales (hoy Honda), Arcos a su Capilla,
Además de abrir la marcha la escuadra de batidores y banda de clarines de los Lanceros de Villaviciosa, los pasos iban acompañados de las bandas de tambores y trompetas de Pavía.
Recordemos que el hábito nazareno en ese momento aún no incluía capa, sino que estaba compuesto solo del antifaz negro y la túnica blanca de cola plisada que se llevaba suelta en aquellos años.
Otro hecho destacable, por lo diferente a la actualidad, es que ‘por distintas calles del itinerario quemáronse al paso de la cofradía infinidad de luces de bengala’.
De preste iba el salesiano D. Manuel Almagro y la presidencia la ocupaba el concejal Sr. Lambarry, Mayordomo Sr. Campoy, canónigo Sr. Rodríguez Sánchez, cura párroco de S. Pedro Sr. García Sánchez y hermano mayor Dr. López Andrades (sic).
Como recuerdo a los reorganizadores a continuación se detallan todos los participantes en este crucial cabildo para la Hermandad:
Don José María Rodríguez Sánchez, Presbítero canónigo de la Real e Insigne Iglesia Colegial de Jerez y Capellán de la Hermandad.
Don Domingo García Sánchez-Pavon, Párroco de San Pedro y Presidente nato de la Hermandad, que no asistió por tener compromisos pastorales.
Don Juan López Andrades
Don Lorenzo Tamayo Ruz
Don Juan Corrales S.-Medina
Don Eduardo Pardal
Don Manuel Calderón
Don Agustín Saiz Corral
Don Justo Martínez
Don Juan González de Rojas
Don Francisco Barrios
Don Dionisio García-Pelayo
Don Manuel Caballero
Don Luis Heredia
Don Antonio Barea Benítez
Don Manuel Barea Rodríguez
Don Antonio L. Piña Sánchez
Don Lorenzo Gutiérrez Capruja
Don Miguel Gil Ruiz
Don Salvador Domínguez
Don José Cortés Vega
Don Manuel Ruiz Romero, actuando de secretario
Don Antonio Gonzálvez Rodríguez, quien fuera primer hermano mayor de la reorganización de 1896 y factótum de la Hermandad hasta 1913.
FUENTES DOCUMENTALES: Actas de la Hermandad de la Coronación de Espinas. Periódico El Guadalete y Archivo Diocesano.
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