Jerez 1949: curiosidades históricas según la oficialidad de un documento cofradiero (y II)

La Semana Santa de 1949 aportó no pocas novedades a los ya entonces innúmeros cofrades de Jerez: una de las principales, por supuesto, la incorporación a la nómina de las cofradías de la Hermandad de la Sagrada Lanzada. Desde el principio en la jornada del Jueves Santo, entonces integrada por Huerto, Esperanza de la Yedra y Mayor Dolor. El periódico local ‘Ayer’ publicó el Jueves Santo, 14 de abril, un número “dedicado a la Semana Santa jerezana”. Casi monográfico. Un documento interesantísimo por lo demás. Ya la portada, ilustrada a todo lo ancho y alto con un collage fotográfico de Sagradas Imágenes en sus respectivos pasos o bien primeros planos de los Amantísimos Titulares, anticipa el buen gusto periodístico de las páginas interiores. Veamos qué se escribe al respecto del estreno de la Lanzada: “Esta Hermandad, conocida por la de los Estudiantes, es la más moderna de cuantas hacen estación en la Semana Santa jerezana. (…) En su estación de penitencia, que la hace en la tarde del Jueves Santo en primer lugar, saca un solo paso. En él va el Santísimo Cristo de la Lanzada, clavado en magnífica cruz con casquetes repujados y ostentando en su divina cabeza potencias de plata sobredorada y asimismo cincelada; la Santísima Virgen de Gracia y Esperanza, acompañada del evangelista San Juan, y de María Magdalena. Delante del Santísimo Cristo, y en actitud de retirar la lanza del divino costado, del que emana abundante sangre, está Longinos montado en brioso caballo, siendo ésta una obra muy acabada del imaginero sevillano don Rafael Barbero”.

Otro párrafo añade: “Los numerosos exvotos que, por favores, figuran en su capilla (la del Santísimo Cristo), es una prueba fehaciente de la devoción que el pueblo de Jerez siente por esta Imagen”. Otras novedades de este año 1949 fue la bendición del “nuevo” simpecado del Santo Crucifijo de la Salud. También es destacable el estreno del manto de la Virgen del Desamparo. Por reseñar a vuela pluma tres referencias muy concretas. El oficial ‘Horario e itinerario’ de la Unión de Hermandades refleja cuatro cofradías para el Miércoles Santo: las Tres Caídas, la Piedad, la Flagelación y el Prendimiento. El Miércoles Santo consigna calles como Canalejas -hoy Ancha-, Juan Gavala -hoy Naranjas- y Patricio Garvey -hoy Mora-. Ya hemos referenciado las cofradías del Jueves Santo. Procesionan Lanzada, Huerto, Yedra y Mayor Dolor. La Madrugada del Viernes Santo, tres cofradías: Santo Crucifijo, Cinco Llagas y Jesús Nazareno. Y el Viernes Santo, Cristo de la Expiración, Soledad y Piedad. En tan solemnes días hallamos calles como Alameda Fortún de Torres -hoy Alameda Vieja-, Ángel Mayo -hoy calle Caballeros- o, dicho sea más enfáticamente, la Hoyanca. Puro San Telmo. En la contraportada de esta publicación de la Unión de Hermandades figura el logotipo de Tipografía Martín.

El papel prensa subrayaba -con nombres y apellidos- las autoridades que presidían los pasos de cada cofradía. Elijamos al buen tuntún el Miércoles Santo. Y así presidían el presbítero Manuel Ortega el paso del Señor de las Tres Caídas, el párroco de San Marcos doctor don José María González Marín y el religioso mercedario fray Pedro Nolasco el palio de los Dolores, la cofradía del Santo Entierro por el reverendo padre fray Luis Moreno, el paso de misterio de la Flagelación por el religioso franciscano reverendo padre fray Valentín Pérez, haciendo lo propio en el palio de la Amargura el párroco de San Pedro don Anselmo Andrades o, en el Prendimiento, el teniente coronel de Sementales don julio Redondo Sepúlveda y el religioso mercedario fray Manuel Incierte en el paso del Señor y el comandante militar de la plaza, coronel de Caballería, don Luis de Agar y el religioso mercedario fray Fermín Gutiérrez en el palio de la Virgen del Desamparo.

Hacíamos alusión a la bendición del simpecado, como estreno del Santo Crucifijo. El periódico recogió dicho acontecimiento con una reseña en la edición del Domingo de Resurrección: “En la solemne mañana del Jueves Santo, a la una, tuvo lugar en el catedralicio templo de San Miguel, la bendición del nuevo simpecado que este año ha estrenado la penitencial Hermandad del Santo Crucifijo, que en dicha iglesia radica. Se hallaba dicho valioso estandarte a la diestra del hermoso paso de Nuestra Señora de la Encarnación, que se encontraba maravillosamente exornado para su salida procesional de la madrugada. Asistieron al acto más de un centenar de cofrades y, por el señor cura párroco y director espiritual, don Rafael Rodríguez, se pronunció un breve y sentido exordio. Ocuparon la presidencia del sencillo acto los miembros de la junta de gobierno señor Marqués de Domecq, don Juan de M. López de Meneses, don Manuel Cabrera, don Pedro L. Jaén y don Ricardo Molina. Asimismo asistió una representación de la Hermandad de las Cinco Llagas, presidida por el mayordomo señor Martínez Arce, que a la terminación del acto hizo la ofrenda de un artístico ramo de flores para la Virgen de la Encarnación, como recíproco homenaje del que vienen recibiendo anualmente al paso de la Hermandad del Santo Crucifijo por San Francisco. Después de tirar unas placas del sencillo acto, en local próximo se reunieron los hermanos para, de una manera sencilla y cordial, festejar la bendición y estreno. Repetimos, a la Hermandad en pleno y a su junta de gobierno, la enhorabuena que en la noticia anterior les expresábamos”.