Andalucía no ha de perder el tren

Justo unos meses antes de que el transporte por ferrocarril se abra a la competencia y Renfe tenga que repartirse el mercado con otras compañías, la ferroviaria pública ha anunciado el lanzamiento de su tren AVE low cost para 2020, que ofrecerá billetes un 40% más baratos respecto al precio medio del servicio de alta velocidad que presta en la actualidad. Parece muy acertado generar nuevos ingresos con precios asequibles para a la vez llegar al público que todavía no es usuario del AVE al considerarlo un lujo al alcance de unos pocos. La decidida apuesta de Renfe también hay que celebrarla, a tenor de que el ferrocarril cada vez debería tener más peso en el futuro de las comunicaciones, al ser un transporte más sostenible, barato y muy rápido. La alta velocidad de bajo coste se denominará AVLO y los billetes saldrán a la venta en enero. Para cuadrar los números, tendrá un 20% más de plazas que los trenes habituales y no contará con clase preferente ni cafetería. Renfe quiere empezar a operar en la línea Madrid-Zaragoza-Barcelona, el corredor de mayor movilidad de viajeros del país y el que más competencia tiene con el avión, pero con el fin de extenderlo progresivamente al resto de la red, una vez se consolide el servicio.

Por ahora, Andalucía, junto al resto de comunidades, ha quedado pendiente para una segunda fase sin que el Ministerio deFomento se haya comprometido a fijar fecha alguna.Esto y nada viene a ser lo mismo, por lo que resulta imposible no acordarse de que, en el 92, el AVE se estrenó con la línea Madrid-Sevilla, en lo que fue una clara apuesta por un territorio más cohesionado. En cambio ahora, teniendo este hito tan presente, no deja de ser significativo que Fomento haya dado a conocer esta ambiciosa inversión en mitad de la negociación entre PSOE y ERC para tratar de sacar adelante la investidura de Pedro Sánchez. Con esta agresiva oferta comercial, el ministro de Fomento en funciones, José Luis Ábalos, destacaba en días pasados que se le ganará la batalla a los competidores y a los vehículos privados. Pero es muy difícil creer en casualidades cuando se anuncia este AVE más barato a la vez que los socialistas están librando una lucha sin cuartel para desatascar su difícil negociación con los independentistas.

Fomento no puede marginar de nuevo al Sur olvidando, en paralelo, las carencias ferroviarias que siguen aún pendientes. Basta recordar la eterna deuda con la conexión ferroviaria Algeciras-Bobadilla y su continuación hasta Madrid, un auténtico símbolo del retraso al que se condena a esta comunidad, en favor de las del Norte, para ahondar por sistema en los desequilibrios territoriales.