Casa Ricardo: el placer de comer con vistas al puerto deportivo de Chipiona

Chipiona no es sólo una población, hay muchas. Cada zona, cada barrio, cada playa… posee unas características propias que enamoran. En el aspecto gastronómico, por ejemplo, puedes disfrutar de experiencias completamente diferentes según tengan lugar en pleno casco histórico, en uno de los chiringuitos en la orilla del océano o en el puerto deportivo.

El restaurante Casa Ricardo, ubicado en el puerto deportivo de Chipiona, ofrece una experiencia única y satisfactoria. Este establecimiento lleno de luz gracias a sus paredes de cristal con vistas al embarcadero, fue inaugurado en 2011. Dispone de comedor y una espléndida terraza, ambos con al puerto deportivo chipionero. Sus responsables son Yolanda Pérez Saborido y su marido Ricardo Tiernes, de quien heredó el nombre.

Aquello que busques lo encontrarás, dado que, posee espacios diferenciados. Uno de ellos se encuentra más alejado del puerto y consta de la barra y mesas en el exterior bajo soportales. Quienes prefieran una comida más distendida con un buen tapeo, este es su lugar perfecto en Casa Ricardo. Por otra parte, el comedor acristalado y las mesas en el exterior colocadas justo al lado de las embarcaciones resulta más apropiado para comidas, en cierto modo, “más formales”. Su decoración sencilla, la luz que lo inunda todo, el escenario y cada bocado forman un tándem perfecto.

Carta Casa Ricardo

La oferta gastronómica de Casa Ricado es amplia y la complementan con varios platos fuera de carta que se personal recomendará. La especialidad son los mariscos y pescados, desde corvina, pargo, dorada, salmonetes, pulpo a la plancha, fritos o al horno. Sirven unos deliciosos langostinos poco cocidos al instante (no hay problema en pedirlos más hechos), gambas, cañaíllas o almejas. Sopa de tomate con gambas, sopa de picadillo o sopa de marisco y diferentes carnes, entre otros muchos platos, completan la carta. Junto a las tortillas de camarones y los langostinos, la estrella es el arroz caldoso al señorito. Todo abrazado a un buen vino y, como colofón, deliciosos postres: tarta de manzana, de queso, brownie con helado y sorbetes.