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Situada cerca de la desembocadura del río Guadalquivir y de Doñana, desde principios del siglo XX, Chipiona –cuna de la célebre artista Rocío Jurado-, se ha visto en televisión y revistas, gracias a la gran promoción que la cantante hacía de su tierra, como buena embajadora que fue. Era habitual verla durante la procesión de la Virgen de Regla, junto a su familia, y disfrutar de algunos descansos allí.
En la actualidad, Chipiona “le devuelve” a ‘La Más Grande’ lo recibido. En su homenaje, los fans de Rocío Jurado, visitantes y curiosos pueden visitar su mausoleo, la estatua de Rocío Jurado, y el centro de interpretación dedicado a su persona, así como a su trayectoria profesional. Hay quienes se desplazan, casi en exclusiva, para realizar la ‘ruta de la Jurado’, de hecho su escultura es el monumento más buscado. Este hecho resulta maravilloso para empezar a conocer en profundidad este maravilloso enclave de la provincia de Cádiz.
Y es que Chipiona es mucho más, es casi todo. En general, es conocida por ser la ciudad natal de Rocío Jurado y un importante enclave veraniego. Posee bellísimas villas de recreo edificadas durante los primeros años del siglo pasado, las cuales otorgan un carácter muy especial a su fisonomía urbana.
Sus playas (Regla, del Camarón, Tres Piedras, Cruz del Mar, Las Canteras, Montijo y la Ballena) son el escenario perfecto para los deportes náuticos que se pueden practicar también en el moderno puerto deportivo. Las Tres Piedras es una de sus playas más escogidas para pasar una jornada de playa o de una gran velada en sus fabulosos chiringuitos con vistas al océano. Los paseos suelen estar animados y bulliciosos, están llenos de terrazas en las que sentarse a disfrutar de la vista del mar, mientras se cata el famosísimo vino moscatel de la tierra.
Todo eso, seguro que lo sabían o lo intuían. Quizá, algunos conozcan sólo de oídas que, la localidad chipionera es puntera en la industria de la flor cortada. Los corrales de Chipiona, donde se capturan de manera artesanal moluscos y crustáceos, son el mejor monumento natural de la localidad y un reducto de la cultura pesquera de la época romana. Este municipio cuenta, además, con zonas de recreo como El Pinar, hábitat del ancestral camaleón, muy común en la zona.
El legado monumental de la localidad es un fiel reflejo de su genuino devenir histórico, remontándose sus orígenes al Imperio Romano.
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