El fantasma de La Dama Blanca de Arizón busca venganza en Sanlúcar

Hay historias y fenómenos paranormales, leyendas, con un poso de realidad. De hecho, hay turistas muy interesados en estos misterios. Tal es la demanda que se organizan tours en las ciudades centrados completamente en ellos. En los pueblos, sobre todo, cada cual la adorna con elementos que le aportan más intriga, miedo o fantasía a un trocito de lo sucedido. En este sentido, Sanlúcar de Barrameda no es menos. La leyenda habla del fantasma de una mujer que habita en un lugar concreto donde, al parecer, fue asesinada y emparedada entre sus muros.

Pueden preguntar en este pueblo, ubicado junto al Atlántico, por la trágica historia de la denominada Dama Blanca. Entre los siglos XVII y XVIII construye la Casa Palacio de Cargadores de Indias de Arizón con un gran torreón destacaba de la casa y servía, desde su privilegiado lugar, a orillas del río, para observar y controlar la llegada a puerto de los barcos cargados de oro y plata, pues poseían una importante flota de barcos.

Todo transcurría con cotidiana normalidad hasta un trágico día de 1736, previa concepción del marquesado a Jacinto Salvador, cuando Diego de Arizón mató a su esposa Margarita Serquera y a su mayordomo Juan Peix por adulterio. Se dice que fue un asesinato cruel. Del sirviente, no ha trascendido nada. De la esposa, según la leyenda, la emparedó entre los muros de la casa palacio, en un punto indeterminado. Sin embargo, su fantasma, bautizado como La Dama Blanca de Arizón, vaga por palacio en busca de venganza: pasea por la casa, por el torreón, sobre todo, en las noches de luna llena pasada la medianoche.

Diego de Arizón fue enviado a la prisión de Cádiz, concretamente al Castillo de San Sebastián; pero más tarde logró ser indultado. Dicen que no le costó barato.

El de Margarita Serquera no es el único fantasma del palacio sanluqueño. Otro miembro de la misma familia se arrojó desde la torre de la casa al ver como uno de esos barcos procedentes de Indias cargados de metales preciosos se hundía antes de llegar a puerto. En opinión de unos resbaló accidentalmente, para otros, se trató de un suicidio como consecuencia de lo que perdía en el fondo del mar, aunque sí coinciden en que su espíritu a veces ronda por la torre donde fue visto por última vez.