Una noche de recuerdos y emociones

La tercera edición del Festival Internacional de la Guitarra de Jerez, esa apuesta que tanto entusiasmo comenzaron hace unos años Santiago Lara y Mario González y que ahora cuenta con el apoyo municipal, arrancó el jueves en La Guarida con un concierto de Alba Espert y Manuel de la Luz. Fue el punto de partida de una edición que tiene como protagonista a Manolo Sanlúcar.

La Guarida del Ángel acogía esta primera velada en la que Mario González, gerente del local jerezano, había preparado meticulosamente la sala para que el público viviera una experiencia de puro tablao. Las mesas y sillas eran ocupadas poco a poco por más de 60 personas que deseaban dejarse llevar a través de la guitarra. Amigos, familiares y artistas como Santiago Lara o los maestros José Luis Balao y Manuel Lozano 'El Carbonero', no quisieron perderse una cita emocionante y que homenajeaba al maestro sanluqueño, el cual no pudo asistir por motivos de salud.

Sobre el escenario, una silla y un micrófono permitían a Alba Espert acomodarse para desplegar sus dedos sobre una guitarra flamenca que hizo vibrar al público. Rondeñas, granaínas, tarantos y peteneras fue el repertorio elegido por la jerezana, que demostró un enorme poderío sobre su instrumento acompañado de la dulzura y mesura que la caracteriza.

Tras el recital de la jerezana llegó el momento de Manuel de la Luz, artista onubense que llegaba "muy ilusionado" de poder tocar en Jerez.

Más curtido y con exquisita técnica, el guitarrista demostró la gran soltura y calidad que atesora tocando por soleás, bulerías y tarantos, entre otros palos. Una actuación que el público despidió con un enorme aplauso para los dos guitarristas y donde el recuerdo a Manolo Sanlúcar estuvo presente en todo momento.