Entre todos, una oportunidad a conseguir
Jerez 2031
La cifra de turistas que cruzaron nuestras fronteras este año expresa, mejor que cualquier otra, el interés de nuestro país y con ello nuestro destino Jerez, como destino internacional y el potencial de sus recursos culturales y naturales. Aunque somos, de hecho, el segundo país del mundo con mayor número de bienes culturales considerados por la UNESCO, como Patrimonio de la Humanidad. Pero, no somos los segundos en turismo cultural. Países como Gran Bretaña o Francia, con menos patrimonio, están muy por encima del nuestro
Motivos. El patrimonio histórico de esos países está mejor gestionado y conservado. El aprovechamiento cultural y turístico de los recursos patrimoniales de España es mucho menor que el de aquellos.
Por ello, es necesario una adecuada gestión con una visión más amplia y a largo plazo, conjunta, entre todos y pensando en el territorio y en la marca nacional y andaluza gaditana y jerezana.
De casi todos es conocido que el turismo hoy es uno o el más importante de los pilares fundamentales de la economía de la provincia de Cádiz, representando aproximadamente el 32 por ciento de su producto interior bruto, generando del orden de 240.000 empleos, tanto directos como indirectos, que genera del orden, en este año que se nos va, la visita de más de 8,2 millones de pernoctaciones en el sector hotelero.
La candidatura de Jerez a convertirse en Capital Europea de la Cultura en el año 2031 nos obliga en encauzar nuestras actividades hacia ese logro. Esta convergencia entre turismo y cultura, sumado al interés creciente de los visitantes por las experiencias culturales, nos brinda al sector turístico una oportunidad excepcional, aunque también plantea dificultades complejas.
En la actualidad, el reto del sector debe avanzar en el nivel de calidad y servicio de la oferta que está disponible. Es, sobre todo, y ligado a este último punto, hacer frente a las innovaciones de la nueva era digital y a los cambios que ésta ha empezado a introducir en los hábitos de consumo y modelos de comportamiento del viajero del siglo XXI.
Por último, no consideremos la cultura el hecho de visitar museos galerías o herencias culturales, sino que significa también incluir la forma de vida de las personas que viven en la zona, incluidos aspectos como el lenguaje, creencias, cocina, tradiciones, etcétera., y todos los productos que derivan de ello. Y quiere y puede disfrutar el Turista Cultural en Jerez.
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