Tribuna Económica
Carmen Pérez
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La evolución digital de las apps móviles de mensajería está a punto de dar un vuelco con la introducción de la interoperabilidad. Este cambio está impulsado por la demanda de usuarios y regulaciones internacionales, particularmente de la Unión Europea.
Este avance tecnológico promete transformar totalmente la manera en que nos comunicamos, eliminando las barreras que existen entre diferentes plataformas de mensajería.
La interoperabilidad se refiere a la capacidad que van a tener aplicaciones como WhatsApp para interactuar y comunicarse con otras aplicaciones de mensajería. ¿Que supone esto? Pues que, muy pronto, los usuarios de WhatsApp podrán enviar y recibir mensajes, fotos, vídeos y otros archivos a personas que usen aplicaciones diferentes, como iMessage, Facebook Messenger, Signal, Skype o Google Messages, siempre que estas adopten el estándar RCS (Rich Communication Services).
La Unión Europea, mediante la Ley de Mercados Digitales, ha sido un gran impulsor en este cambio, exigiendo a las grandes tecnológicas abrir sus plataformas para fomentar la competencia y mejorar la experiencia del usuario. WhatsApp, propiedad de Meta, ha sido designada como "guardiana de acceso" y, por lo tanto, debe adaptarse a estas nuevas normativas.
La interoperabilidad no solo afectará a WhatsApp sino también a otras aplicaciones bajo el paraguas de Meta, como Facebook Messenger.
La implementación técnica de esta interoperabilidad se basará en la estructura cliente-servidor actual de WhatsApp, permitiendo que clientes de terceros se conecten directamente a su infraestructura. Esto abrirá un nuevo menú de "chats de terceros" dentro de la aplicación, donde los usuarios podrán gestionar estas comunicaciones interplataforma. Sin embargo, esta funcionalidad será opcional, dejando en manos del usuario la decisión de habilitarla.
Una de las preocupaciones que hay en torno a la introducción de la interoperabilidad es la seguridad y privacidad de las comunicaciones. Meta ha asegurado que mantendrá el cifrado de extremo a extremo, aunque las conversaciones con aplicaciones de terceros se almacenarán en una bandeja de entrada separada por razones técnicas y de seguridad. Las aplicaciones compatibles deberán adherirse al protocolo de cifrado utilizado por WhatsApp o garantizar estándares de seguridad equivalentes.
Este cambio es un paso adelante hacia un sistema de comunicación digital más unificado, y así, de esta manera, la elección de la aplicación de mensajería no limitará con quién podemos comunicarnos. Aunque la interoperabilidad se lanzará en un principio para mensajes, imágenes, mensajes de voz, vídeos y archivos, se espera que en el futuro se expanda a llamadas y chats grupales también.
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