Notas al margen
David Fernández
El problema del PSOE-A no es el candidato, es el discurso
A los padres les preocupa el uso que hacen sus hijos de la tecnología y buscan un equilibrio adecuado entre el tiempo que pasan delante de las pantallas y el resto de sus actividades.
Las necesidades y perspectivas sobre esta cuestión varían de una familia a otra y por eso muchas compañías ofrecen herramientas que puedan ayudar a cada familia a establecer sus propias normas básicas.
Es el caso de Google, que a sus distintas opciones de control parental añaden ahora el modo horario escolar, una nueva función a los teléfonos Android y otros dispositivos que permite a los padres regular el uso de la tecnología durante las horas lectivas de sus hijos.
Una de las cosas que más inquieta a los padres, y así lo manifiestan en diversos foros, también cuando contactan con las tecnológicas, es que sus hijos se distraigan cuando están en el colegio o en el instituto. Pero también quieren poder ponerse en contacto con ellos en caso de emergencia.
Por eso Google ha introducido el llamado modo horario escolar en los relojes inteligentes Fitbit Ace LTE.
Según avanza la compañía, a lo largo del próximo año extenderá esa función a otros dispositivos, como teléfonos y tablets Android o los relojes Samsung Galaxy, para, dicen, contribuir a un entorno educativo más productivo.
El modo horario escolar está pensado para reducir las distracciones durante las clases y permite a los padres configurar en el dispositivo personal de su hijo una pantalla de inicio con una funcionalidad limitada durante las horas lectivas.
Desde Family Link, la aplicación de control parental de Google, los padres pueden seleccionar qué aplicaciones se encuentran disponibles en ese horario.
También tienen la opción de permitir llamadas o mensajes de texto de contactos específicos.
Este modo horario escolar también puede activarse fuera de las horas de clase, en momentos en los que el menor deba concentrarse en otra cosa o descansar de las pantallas.
Pensando en los adolescentes que no están bajo supervisión de alguno de sus padres a través de Family Link, Google ofrece en los dispositivos Android un modo concentración que desactiva las notificaciones y limita la distracción durante periodos de tiempo específicos.
Cuando los niños crecen y llegan a la adolescencia, muchos padres se plantean otras opciones de supervisión que se adapten mejor al grado de madurez de sus hijos y al uso que hacen de la tecnología.
Esa supervisión varía según la edad del menor y su desarrollo y también según la forma de entender la paternidad de cada familia.
La respuesta de Google a ese escenario es ofrecer ajustes y experiencias a medida.
Según explican desde Google, la investigación y el desarrollo para dar respuesta a las necesidades en constante evolución de los padres y los hijos es continua.
Desde la empresa colaboran con expertos en desarrollo infantil, educación y tecnología, para que la tecnología siga facilitando el aprendizaje y la exploración, pero con seguridad.
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