Orgullosos de sus colores

Numerosas fueron las caras conocidas que acudieron al emotivo acto en Madre de Dios. Y es que aparte de los incondicionales de siempre, también se dieron cita en el mismo los cuatro capitanes del equipo, así como el presidente de honor de la entidad, Rafael Verdú, que vivió con especial interés la iniciativa.

Rafa Verdú, que tuvo incluso que detener su discurso al invadirle la emoción, sugirió que "ha quedado muy bien y sirve para engrandecer más si cabe a esta ciudad y a este equipo que tanto amo desde hace muchos años".

Cuando se está a un paso del ascenso, el ex futbolista azulino aseguró que "esto es culminar sesenta y dos años de vida del Xerez Club Deportivo. Lo tenemos prácticamente hecho y es la mayor alegría en mi vida deportiva. Me considero jerezano y no puedo pedir más. Lo único que siento es que muchas personas que han hecho grandes cosas por este club o que le han seguido desde siempre no puedan acompañarme aquí en este acto tan bonito".

De la misma opinión era Jesús Mendoza, capitán xerecista. El del Chicle, que está viviendo con especial interés toda esta cascada de sensaciones, comentó que "ha sido una grata sorpresa y la verdad es que le queda bastante bien la ropa. Estamos muy contentos de que poco a poco la ciudad se vaya engalanando y que se sienta este ambiente. Nos queda poco para conseguir el objetivo y nada, a ver si llega ya para poder celebrarlo. Toda la ciudad está ilusionada con el club, no sólo el xerecismo y es algo muy bonito".

Otro de los jerezanos de la plantilla, Pedro Ríos, calificó como "un orgullo ver al Minotauro con la camiseta del Xerez, que por cierto le queda bastante bien. Que en una entrada de la ciudad como es ésta que se vean los colores del Xerez para mí es un orgullo, igual que para cualquier ciudadano y xerecista".

Emilio Viqueria, por su parte, tampoco daba crédito a la gran expectación que levantó el acto: "El otro día cuando llegamos a la una de la mañana de Gerona había mucha gente esperando y hoy, igual. La verdad es que estamos viviendo unos días muy bonitos. Estábamos en deuda con la afición por el apoyo que nos ha demostrado siempre y esta temporada le vamos a corresponder".

El gallego sueña con el día del ascenso pero no tiene ni idea de cómo "será porque la afición no nos está dando pistas, creo que habrá celebraciones por todo Jerez. Serán unos momentos inolvidables para disfrutarlos a tope, pero antes de que eso se produzca tenemos que ganar el domingo al Castellón. Esperamos que la afición se vuelque y llene Chapín porque la vamos a necesitar para sacar el partido adelante".