Un revés inesperado (1-3)

XEREZ-HUESCA

Toque de atención El Deportivo se vio sorprendido por un rival eficaz, capaz de terminar con su racha de cuatro triunfos seguidos Sin claridad Los xerecistas no tuvieron su tarde y nunca mandaron en el partido

Foto: Miguel Angel Gonzalez
Foto: Miguel Angel Gonzalez
M. Romero / Jerez

11 de octubre 2010 - 01:00

Adiós a la racha y curita de humildad. El Xerez no ofreció su mejor versión y cayó de forma contundente ante un Huesca que en ningún momento demostró que hasta ayer no había sido capaz de ganar ni un solo encuentro desde que comenzó la temporada. Javi López había comentado durante la semana que no se fiaba del rival y que había que tener sumo cuidado con este partido. No le faltó razón.

No fue la tarde del Deportivo y el recuerdo del ascenso a Primera al reencontrarse con el cuadro oscense sólo duró el tiempo que tardó Miranda Torres en señalar el inicio del choque. El equipo xerecista nunca demostró estar capacitado para sacar adelante el partido, no tuvo ideas, ni fluidez, ni fue capaz de meter la intensidad al juego que le había metido en jornadas anteriores.

Para colmo, Onésimo leyó mejor el choque que Javi López, que tampoco supo romper el entramado que le planteó su rival de salida. Es cierto que el Deportivo tuvo opciones pero no las suficientes como para hacerse merecedor de los tres puntos.

Roberto mató a los xerecistas con sus dos goles en una primera parte para olvidar, en la que el equipo no se encontró a sí mismo y fue un espejismo del bloque compacto, serio y competitivo de las últimas cuatro jornadas. Entró al partido de forma esperanzadora pero pronto perdió fluidez, se desconectó y las ideas comenzaron a brillar por su ausencia, algo que le costó muy caro porque el Huesca hizo todo lo contrario. Fue listo, llegó y besó el santo.

Al filo de la media hora, Roberto marcó un buen gol desde más de 35 metros, al ver a Lledó adelantado y después de bajar un balón a tierra tras un saque de su propio guardameta. Sólo siete minutos más tarde, el ariete madrileño logró un 0-2 que dejó a Chapín helado y con la sombra del encuentro del Cartagena planeando sobre el plomizo cielo jerezano.

Lo peor de todo es que el 0-2 se pudo haber convertido en 0-3 en la prolongación, cuando Gilvan, otro jugador que hizo lo que quiso por su banda, recortó a Mendoza y se sacó un zurdazo que no entró porque Lledó se estiró para mandar su disparo envenenado a saque de esquina. Hubiese sido prácticamente la puntilla a una primera mitad en la que el cuadro de Javi López apenas existió y sufrió a un Huesca que se encargó de invertir los papeles. Los oscenses parecían afianzados en la parte media-alta de la tabla y los azulinos en la baja.

En el segundo tiempo se vivió otro choque diferente. El Huesca regresó al terreno de juego sin apenas creerse la ventaja con la que se marchó al vestuario y dio un peligrosísimo paso atrás. La presión de los xerecistas fue mayor y en apenas cinco minutos, Miranda Torres dio muestras de lo mal árbitro que es, al dejar de señalar un posible penalti por manos de Ochoa, al que de forma inteligente Onésimo sacó del campo para evitar problemas, y otro sobre Mario Bermejo, que cayó cuando ya le había ganado la posición a su par.

Javi López, ante el descosido que le habían hecho a su equipo, intentó reparar el daño, apostando por Héctor Font y Antoñito en lugar de Barber y Pablo Redondo.

Aún así, el Huesca a la contra perdonó. En el minuto 65, Onésimo casi no se deja ni un pelo en su melena después de lo que falló su ariete Roberto. Gilvan se marcó un contragolpe perfecto, se marchó de todos los azulinos que le salieron al paso, disparó bien pero su tiro se estrelló en el palo. El rechace le cayó a Roberto, totalmente solo y con todo a favor, y mandó fuera el esférico.

Y cuando peor pintaban las cosas, el Xerez se rehizo y acortó distancias con un gol de Héctor Font, que metió a su equipo en el partido. El empate era posible ante un rival falto de autoestima, la afición se dio cuenta de ello y comenzó a apretar pero está claro que cuando no está el santo de cara, no vale nada.

Sólo tres minutos después del tanto de Font, Bauzá marcó el gol de su carrera. Recogió un balón rechazado en la frontal del área tras un saque de esquina y marcó de volea.

Esa jugada prácticamente mató el encuentro. Los azulinos acusaron demasiado el mazazo y si hasta ese momento se habían empleado más con el corazón que con la cabeza, esa fue la tónica hasta el final, la impotencia elevada a su máxima expresión.

La recta final del encuentro fue un quiero y no puedo de un Xerez que no supo leer el partido, que abusó del juego vertical, que no explotó a Capi y que dejó escapar tres puntos ante un Huesca que tuvo fortuna de cara al gol -anotó tres goles en cinco llegadas al área- pero no es menos cierto que tanto López como sus jugadores dejaron patentes aspectos que deben corregir ante rivales que le tapan bien tanto las bandas como la línea de creación.

Ficha técnica:

1 - Xerez: Lledó; Redondo, Mendoza (Capdevila, m.75), Lombán, Mario Bermejo; Capi, Cordero, Gerard Autet, Barber (Héctor Font, m.54); Pablo Redondo (Antoñito, m.54) y José Mari.

3 - Huesca: Andrés; Helguera, Marcos, Ochoa, Echaide; Molinero, Roberto (Marco Navas, m.84), Camacho, Gilvan; Bauza y Sastre (Sorribas, m.64).

Goles: 0-1, M.28: Roberto. 0-2, M.35: Roberto. 1-2, M.72: Héctor Font. 1-3, M.74: Bauzá.

Árbitro: David Miranda Torres (Comité Catalán). Amonestó a los locales Capi, Barber, Bermejo y Héctor Font y a los visitantes Ochoa, Roberto, Gilvan, Echaide, Corona, Molinero y Andrés.

Incidencias: Partido disputado en el estadio Chapín ante unos once mil espectadores. Terreno de juego malas condiciones.

stats