El Deportivo pierde el partido del caos con bronca monumental al final (1-2)

Vuelta a las andadas. Derrota del Xerez CD cuando lo tenía todo para ganar. El Deportivo ha perdido en el Pedro Garrido frente a la Balona por 1-2 en un encuentro loco, disparatado, con dos partes totalmente diferentes y en el que el equipo de Checa se diluyó como un azucarillo. Diego Domínguez adelantó a los azulinos de penalti a los cuatro minutos y perdonó al rival, pero en la segunda no dio pie con bola y se la regaló a un rival que remontó con dos tantos de Fran Carbiá. Y para que no faltara de nada, bronca final, con lanzamiento de objetos, tángana entre jugadores, expulsiones y de todo lo imaginable y por imaginar. Con la derrota, el cuadro xerecista se complica. Se coloca a tres puntos del descenso.

Checa, con cinco bajas importantes por lesión -Iago Díaz, Ricky, Nané, Adolfo y Del Río-, tuvo que apostar por un once con variantes. Para Santos fue la portería y la defensa, de derecha a izquierda, la integraron Paco Torres, Josete, Geoanni y Sergio López, que suplió a Del Río, con Adri Rodríguez y David García en la medular, Misffut, titular después de su buena actuación en Murcia, Charaf y Armengol, otra de las novedades, por delante y Diego Domínguez como referente.

Diego abre la lata de penalti (1-0)

Ambas escuadras se jugaban mucho y el Xerez CD entró al partido intenso, con ganas e invitando a la grada a volcarse desde el minuto uno. Y no tardó en obtener recompensa a esas ganas y a ese ímpetu inicial. Un saque de esquina botado por Geovanni lo mandó al palo Diego Domínguez y en el rechace, penalti claro sobre Diego Domínguez. El delantero, que hace dos jornadas le cedió la pena máxima a su compañero Nané, ahora lesionado, asumió la responsabilidad y con calidad y tranquilidad superó a Álex Lázaro. 1-0. Minuto 4.

La tarde y el encuentro no podían comenzar mejor para una escuadra que necesita confianza porque, aunque había encadenado dos jornadas sin perder, aún su nivel dista de ser el deseado. Mientras, la Balona ni estaba ni se le esperaba y los azulinos aprovechaban los desajustes para tener presencia en el área, aunque no acertaba a finalizar.

Dominio total

Los xerecistas, antes del cuarto de hora, ya habían forzado cinco córners y los visitantes sufrían muchísimo en ese tipo de acciones. En el 13', Missut remataba uno de esos lanzamientos efectuados por Geovanni, lo rechazaba el portero en primera instancia y Paco Torres estuvo a punto de hacer el 2-0, pero un defensa mandó fuera el balón. Y poco después (18'), también a balón parado fue Geovanni el que puso a prueba al meta balono, que se tuvo que estirar para meter la manopla arriba.

El crono avanzaba rápido y los albinegros, a balón parado, intentaban ganar metros, sacudirse el dominio y hacer daño a un Deportivo seguro atrás, pero que no se podía confiar con el viento. A la media hora, José Antonio mandó a las manos de Santos una falta desde la frontal y minutos antes del descanso, dos ocasiones para los azulinos. Adri cabeceó a las manos del portero una asistencia de Charaf (43') y Diego mandó fuera cruzado un buen disparo desde la derecha ya en la prolongación. Los visitantes mostraban sobre el verde más que nerviosismo, ansiedad por la delicada situación que atraviesan y cometían fallos que los azulinos no supieron aprovechar.

Doblete de Carbiá

Checa y Javi Moreno hicieron un cambio cada uno en el descanso buscando ampliar el tanteador con el viento apretando y en contra. David García se quedó en la caseta y también Juan Antonio por parte visitante y saltaron al verde Reina y Alberto Fuertes. La Balona no desaprovechó la primera clara que tuvo en este segundo tiempo. Fran Carbiá, totalmente libre de marca, mandó de cabeza dentro un balón largo llovido. 1-1. Minuto 50.

Pero lo peor estaba por llegar. El descontrol de los xerecistas en el segundo acto era total y Carbiá ahondó en la herida. En el 58', otra vez Fran Carbiá era el más listo de la clase. Recogió el rechace de un tiro que él mismo se inventó tras un saque de banda que despejó el portero.

El guión había cambiado de forma radical. El Deportivo había pasado de dominador a complicarse ante un rival al que dio vida de forma increíble. Los aficionados de la grada del marcador se habían trasladado a la del albergue, empujaba y pedía a su equipo intensidad, pero en ataque se le habían nublado las ideas. Y en el 72', explotó contra el colegiado por no señalar un posible penalti por manos. Checa se ganó la amarilla por protestar.

Sin ideas

Reina aparecía en el caos y en el 75' mandaba arriba un disparo desde la frontal. Era poco bagaje para hacer daño a un equipo que tenía claro lo que tenía que hacer para perder tiempo y para que el botín no se le escapara. Y en el 78', Ulloa, con todo a favor para disparar, tropezó y cayó solo antes de rematar... Al Deportivo ya no le salía nada.

Y en el 88', el viento evitó el tercero de la Balona. Un despeje de Santos pegó en la espalda de Joao Pedro y se estrelló en el larguero. Aún pudo ser más sangrante la herida. El descuento fue de cinco minutos, pero el Xerez CD sólo se movía a impulsos y arreones que no le llevaban a buen puerto.

El esperpento final no hay por donde cogerlo. Con un saque de esquina a favor, los aficionados de la grada del abergue comenzaron a lanzar objetos al campo y los futbolistas se enzarzaron en una monumental bronca que el árbitro, totalmente superado, zanjó con rojas para unos y otros. Peor, imposible... Charfaf recibió insultos racistas por parte de un jugador contrario y fue la gota que colmó el vaso. Y pasó lo que nunca debió pasar.