García Tébar, técnico de Xerez DFC, apuesta por la fase de ascenso y pide "que ruja Chapín"

Fútbol | Tercera División

El manchego admite que "estoy encantado de estar aquí, necesitamos resultados y nuestro problema es que defendemos bien y atacamos mal"

Andrés García Tébar nuevo entrenador del XerezDFC
Andrés García Tébar nuevo entrenador del XerezDFC / Miguel Ángel González
M. Romero

07 de febrero 2019 - 20:42

Jerez/Andrés García Tébar ya ejerce como nuevo entrenador del Xerez DFC. Sin tiempo ni para conocer a la plantilla, ha tomado las riendas del equipo con el único objetivo del disputar la fase de ascenso a Segunda B. Cree firmemente en su trabajo, confía en la reacción de unos jugadores que "tienen que querer", tiene claro que "necesitamos resultados antes que nada" y pide apoyo a la afición porque "no soy demagogo, sin aficionados no existiría el fútbol".

De entrada, aseguró sentirse "orgulloso de estar aquí. Le doy la gracias tanto al presidente como a la junta directiva y a Edu por permitirme estar aquí. En mi profesión es un lujo trabajar y eso me tiene que hacer la persona más feliz del mundo. Estoy encantado y también tengo ilusión por venir a un club como este y a una ciudad como esta. Cuando Edu me llamó y me comentó que me seguía y que admiraba mi trayectoria, me hizo feliz, no esperaba que nadie me siguiese de ese modo".

Las negociaciones fueron rápidas porque "las categorías son importantes pero hay equipos como este, y no quiero ser populista a la hora de decirlo, a los que elegiría antes que a cuarenta de Segunda B. ¿Por qué? Porque la posibilidad de crecimiento que puedo tener aquí, en clubes de superior categoría es muy complicada".

"Bendita presión, no me pesa, cuando la hay es porque estás luchando por algo"

Con mucha experiencia en los banquillos en todo tipo de equipos, la presión "a estas alturas no me pesa, sé convivir con ella, lo que me preocupa es que los chicos la aguanten. Bendita presión. Cuando hay presión es porque estás luchando por algo, lo que no me gustaría es no tener periodistas preguntando o encontrarme con cien aficionados en las gradas".

Entrenar a un equipo en Tercera con el potencial del Xerez DFC lo considera "un lujo. Hay instalaciones, masa social, muchas cosas buenas. Por todo esto estamos en deuda con la afición, todo eso está por encima de los resultados ahora mismo".

Lo que más le preocupa en estos momentos es "venir a sustituir a un entrenador con unos números que en realidad no son malos, son normales. Lo lógico es que el equipo encaja muchos goles pero no es el caso, está entre los menos goleados, lo tremendamente preocupante es que hacemos muy pocos goles. El problema está detectado y tenemos que buscar soluciones".

Y las soluciones que conoce "una es que los jugadores del centro del campo hacia arriba, y también los otros, mejoren esas prestaciones y las otras dos son tácticas. Si en un momento determinado la gente de arriba no te hace goles, pues tendremos que hacer una presión muy alta, jugar en campo contrario, recuperar en tres cuartos de campo y luego finalizar. También el balón parado es importante".

A la hora de dirigirse a la afición se salió de los tópicos "que todos decimos siempre, voy a trabajar, voy a ser muy profesional, soy muy honrado", y apuntó: "Lo más importante en este juego es el aficionado, lo que sucede es que muy pocas veces le damos la importancia que tiene. Lo digo de verdad, nadie se imagina un partido sin aficionados, es que no existiría el fútbol".

"Lo más importante en el fútbol son los aficionados, tenemos más masa social que nadie y eso nos da ventaja"

"El protagonista aquí -añadió- es el aficionado y tenemos una ventaja sobre los demás, tenemos en esta categoría más masa social que tiene nadie. En estos momentos, sólo el Jaén tiene más socios que nosotros, cuatro mil. Pocos equipos de los más de cuatrocientos de Tercera nos superan. El aficionado lo que quiere es ver ganar a su equipo y el de aquí en inteligente porque viene de vivir situaciones deportivas mejores que las de ahora y son insatisfechos por naturaleza. Aquí, lo que quiere el aficionado es ascender a Segunda B y, a partir de ahí, pensar en Segunda A".

García Tébar, además, fue directo: "Acabo de llegar y ya estoy pidiendo pero es que el domingo tenemos un partido tremendamente importante porque lo que no tenemos es tiempo. No es una final, no es un encuentro decisivo porque tendríamos margen en catorce jornadas más. Sin embargo, todos sabemos que el domingo puede ser un punto de inflexión importante sin lugar a dudas. Sé que ellos lo saben y me gustaría oír rugir a Chapín, que hubiera efervescencia. Me gustaría que mis futbolistas tuviesen ese apoyo y esa ayuda para que entre todos juntos, remando en la misma dirección, podamos lograr los objetivos".

A los jugadores en la prima toma de contacto "no les voy a pedir nada, son ellos los que en realidad me tienen que decir qué es lo que ocurre o dónde les puedo ayudar siempre que ellos quieran que yo les ayude. A partir de ahí, quiero conocer su opinión, que es la más válida. Es un momento para trabajar y para hablar en el campo".

En cuanto su estilo de juego, el nuevo entrenador azulino no quiso encasillarse. "A todos los entrenadores en nuestras presentaciones nos gusta decir que queremos que jueguen bien nuestros equipos. El mejor medio para ganar es ese. Cuando mi equipo juega próximo al área rival, me lo paso bien pero lo paso fatal cuando es al revés. Pero en estos momentos hay que tener en cuenta distintas connotaciones, no es lo mismo coger a un equipo al principio de temporada que ahora. Primero tengo que recabar información de todas las partes".

También, resalta: "No soy un demagogo ni de los sistemas ni de los estilos ni de los esquemas, lo que hago es ver las características de los futbolistas, adaptarme a eso y a partir de ahí aplicar el dibujo. No puedo hacer lo que me guste, esto es Tercera División y necesitamos resultados. Si logramos resultados, seguro que mejoramos en nuestro juego. En esta categoría un equipo debe ser camaleónico y adaptarse a las circunstancias y a los lugares en los que vaya a jugar. Para atacar bien, hay que defender bien. Aquí al Xerez le sucede al contrario, defendemos bien, tenemos buenos números defensivos, pero atacamos mal, esa es la realidad".

De cara al encuentro del domingo ante el Ceuta, no va a tener demasiado tiempo para "cambiar cosas, es imposible. Lo coherente es recabar información y apoyarme en lo que me comente toda la gente que va a trabajar conmigo. Intentaremos presentar al mejor once posible".

stats