Con diez, cuarta derrota consecutiva (1-0)

Cuarta derrota consecutiva. El Xerez DFC no remonta el vuelo y ha perdido en La Constitución por 1-0 ante un Yelcano superior, que además jugó con un futbolista más una hora por la rigurosa expulsión de Rafa Parejo en el minuto 27 en un balón dividido. Con este nuevo revés, los azulinos regresan a puestos descenso, ya que todos sus rivales directos lograron sumar.

Francis no realizó demasiados cambios en el once respecto al que perdió por 1-2 la pasada jornada en Chapín ante el UCAM. Apostó por la misma defensa, con Marcelo otra vez en el lateral izquierdo, Rasines en el derecho y Oca y Adri Crespo como centrales. Lolo Garrido, baja por sanción ante los universitarios, regresó a la medular junto a Rafa Parejo. En las bandas, repitió Fran García y apareció Erik Aguado, de los mejores en la última cita, en lugar de Bello. Carri conservó su puesto en la mediapunta y David Agudo también fue titular arriba.

Los azulgranas, por su parte, apostaron por una alineación con retoques, ya que llegaba a la cita con tres bajas por sanción, Paco López y Diego Ruiz, expulsados el domingo en el Jesús Navas, y Alvarito, que cumplía el segundo encuentro de castigo tras ver una roja directa contra el Recre, y con dos puntas, Boris y Silvente.

El encuentro, en un terreno de juego corto y estrecho, arrancó intenso, con un cuadro local apretando y que al minuto de juego ya botó el primer saque de esquina y probó fortuna con un lanzamiento de Silvente que se marcó alto. Los xerecistas lo intentaron a balón parado, con una falta lateral que botó Carri al primer palo a la que no llegó Lolo Garrido por centímetros (6') y la atajó el meta Iván Martínez. El juego aéreo comenzaba a ser protagonista y los dos puntas del Yeclano.

Intercambio de golpes

El intercambio de golpes era constante. Pau Pérez puso a prueba a Quesada (10') con un disparo que le salió centrado, el cuadro visitante respondió con otra falta lanzada por Carri y al filo del cuarto de hora Boris tuvo una clara opción. Quesada estuvo inspiradísimo en el mano a mano ante el punta azulgrana para evitar el 1-0.

Con el paso de los minutos, el Yeclano ya no se mostraba tan cómodo, le costaba más jugar rápido con sus dos torres, ante un Xerez DFC que se dejaba ver en ataque, pero en el 21', los locales perdonaron. Un buen disparo de Pedrosa tras un gran pase de Pau Pérez se estrelló en la cepa del poste del portal de un Quesada que no llegaba al balón.

Roja a Parejo y gol

En el minuto 27, las cosas se complicaron para el equipo de Francis. El colegiado expulsó a Rafa Parejo en un balón dividido con Pau Pérez. El azulino levantó la pierna para intentar llegar a una pelota que botó muy alta, el azulgrana agachó la cabeza y Gonzalo Sánchez sacó la roja. El Yeclano, en superioridad, apretó y ganaba la partida a los xerecistas a base de transiciones muy rápidas, aunque los de Francis se defendían con orden.

La primera mitad llevaba camino de terminar con empate, pero un fallo defensivo de los azulinos no lo desaprovechó el delantero Silvente. Recogió en la corona del área un balón colgado que no despejó ningún xerecista y con la zurda batió a Quesada con un tiro ajustadísimo al palo. 1-0. Minuto 44.

Meléndez por Marcelo

Los azulinos regresaron al verde con un cambio. Marcelo se quedó en la caseta, entró Menéndez y Francis retocó su esquema, pasando a jugar con tres centrales para intentar contrarrestar mejor a un rival que jugaba más tranquilo, tocaba más la pelota y generaba más situaciones de peligro. A los azulinos no les quedaba otra que aguantar el chaparrón y buscar las contras.

Quesada, a la hora de juego, se hizo grande para volver a salvar a su equipo. Valiente y seguro evitó que Boris anotase el 2-0 y luego, fue Silvente el que mandó alto un remate de cabeza. Eran los minutos de más sufrimiento para un Xerez DFC que se veía superado por un rival que había metido ya una velocidad más en busca del segundo.

El partido entró en su recta final con un carrusel de cambios la lesión del guardameta Iván Martínez, que arañó minutos crono. Su equipo encadenaba cinco jornadas sin ganar y todo valía. Boris, una pesadilla para los xerecistas, seguía con claras opciones, pero no tenía su suerte y sí Jano Quesada.

La escuadra azulina quemó sus naves en el descuento, también apretó los dientes y buscó a la desesperada una acción para hacer daño a los locales, pero no pudo ser. La cuarta derrota fue inevitable.