Los Playmobil se hacen grandes en Cádiz

La fantasía, aunque parezca patrimonio infantil, no tiene edad. Los juguetes tampoco tendrían que tenerla. El coleccionismo es de hecho una actividad de la edad adulta que en muchas ocasiones sirve para dar rienda suelta a ese deseo innato del ser humano de fantasear con otros mundos, con los posibles y con los imposibles. Algo semejante se adivina en los coleccionistas de Playmobil, los históricos muñecos que poseen un universo propio y que en estas fechas navideñas se hacen grandes en la capital gaditana con la exposición ‘Cádiz Click’, que bajo el paraguas de Cádiz Centro Comercial Abierto se muestra en el local de la calle Feduchy, 8 cedido por la clínica de La Salud.

Un total de nueve dioramas, algunos de gran tamaño, se muestran en este espacio de unos 150 metros cuadrados en el que Enrique Cabello, propietario de El Trastero de Kike en la calle Sacramento, ha organizado esta exposición con piezas de su propia colección (hasta cinco dioramas son suyos) y otras de coleccionistas de Cádiz, Jerez y Puerto Real. Es el segundo año que se hace, después de que en 2021 comenzara la experiencia en un local bastante más pequeño de la calle José de Toro.

En el de la calle Feduchy, ubicado en su extremo más cercano al Palillero, ha podido aumentar el número de escenas y ha montado un pequeño espacio de ocio para los niños con varios juguetes y libros.

Las escenas montadas con los Playmobil y todas sus piezas de construcción recrean, con infinitos detalles, mundos como el de la película ‘Coco’, un zoo, la Semana Santa de Cádiz con la procesión del Nazareno, un portal de Belén, el fantástico mundo de Novelmore (una línea comercial de Playmobil con magos, monstruos, demonios y animales fantásticos que encantan a los más pequeños), una escena de ‘Donde está Wally’, otra del Polo Norte, una pequeña vitrina que mezcla el mundo de las adopciones de animales con el Quijote o un parque navideño y un último y espectacular diorama de gran tamaño que recrea una coronación real en una impresionante y lograda Catedral del medievo.

Son escenas muy coloridas, mayormente divertidas y con muchísimos detalles a descubrir. La procesión del Nazareno por la plaza de la Catedral (representada aquí con una fotografía) cuenta con las imágenes religiosas y los penitentes realizados por el propio Enrique Cabello, igual que los pasos.

Detrás de este montaje hay un gran trabajo, como explica el propio organizador. Horas y horas de dedicación, de almacenaje, de planteamiento de escenas, de traslado y colocación de los muñecos y sus construcciones. Un esfuerzo que se recompensa con la exposición pública de sus colecciones.

A los visitantes, niños y mayores, se les da la posibilidad también de participar en un juego: cada una de las escenas contiene un gazapo, un muñeco intruso que no tiene que ver con la temática del diorama. Si se aciertan al menos tres, se participa en un sorteo final de muñecos Playmobil de tamaño mediano.

La entrada a la exposición tiene un precio simbólico (dos euros para los adultos y uno para los niños) con el que los organizadores cubren los gastos de las dos personas que se encargan de atender a los visitantes en el local de Feduchy, que abre sus puertas todos los días hasta el 7 de diciembre (menos los días 1 y 6 de enero) de 11.00 a 14.00 y de 18.00 a 21.00 horas. Los días 24 y 31 de diciembre sólo se puede disfrutar de la exposición en horario de mañana.