Camarón se asoma ya a su Museo en San Fernando

San Fernando/Las obras para la construcción del Museo Camarón en San Fernando encaran ya su recta final y los avances son claramente visibles desde el exterior, donde esta semana se ultiman los detalles de una fachada tan llamativa como diferente en la que la reproducción a gran escala de fotografías históricas del célebre cantaor isleño permite ya avanzar lo que será la imagen final de este equipamiento cultural costeado en su mayor parte por los fondos ITI (Iniciativa Territorial Integrada).

La idea que se persigue con ese diseño urbanístico, ese juego de las imágenes que sobresalen de la fachada, es que el contenido del Museo Camarón asome y salga hacia el exterior de la misma forma que las cristaleras de la planta baja pretenden un espacio abierto, como si la plaza colindante accediera también al interior del edificio y formara también parte de él.

El Museo Camarón, construido junto a la emblemática Venta de Vargas, estará acabado este verano. Las obras, reanudadas en el pasado mes de octubre tras una cesión de contrato que supuso un parón de dos meses, han sido una de las pocas actuaciones que en La Isla han estado en marcha durante el estado de la alarma. La actual adjudicataria, la empresa Bauen SA, solo dejó de trabajar durante las dos semanas de abril en las que se suspendieron todas las actividades no esenciales por orden del Gobierno.

La alerta sanitaria desencadenada por la pandemia del coronavirus ha ralentizado los trabajos, aunque no demasiado. De hecho, la obra -la construcción del edificio en sí- se encuentra al 99,52%, según el dato facilitado por la concejala de Desarrollo Urbano, Claudia Márquez. Solo quedan acabados y algunos detalles que se prevé terminar en pocos días.

En lo que se está trabajando ahora, una vez construido el nuevo edificio, es en la faceta museográfica del museo, la parte expositiva en sí, ese recorrido por la vida del cantaor que nació en La Isla para revolucionar el flamenco.

Ya se han empezado a colocar vitrinas, paneles y demás mobiliario. Es decir, que el montaje de lo que será el Museo Camarón en sí ya ha dado comienzo. "Estos trabajos -señala Márquez- están a un 30% de ejecución".

A las obras, admite la responsable de Urbanismo en el Ayuntamiento de San Fernando, no les queda mucho para terminar, si bien es cierto que con la situación propiciada por el Covid-19 se manejan otros tiempos para algunos de los suministros pendientes para completar el tema museográfico. Por eso el Consistorio isleño prefiere ser prudente y hablar de su terminación en el próximo verano.

Claro que para su puesta en funcionamiento habrá que esperar todavía a que el Ayuntamiento resuelva su concesión a una empresa especializada, un trámite en el que ya se está trabajando con la idea de tener un museo vivo y dinámico.

En La Isla, la construcción de este museo dedicado a José Monje se pretende desde hace décadas y el proyecto que ahora se costea con la ayuda de la ITI se presenta como un auténtico punto de inflexión en ese afán por promocionar la relación de la ciudad con la marca Camarón.

El proyecto, que supera los cuatro millones de euros, fue posible gracias al convenio que el Ayuntamiento firmó con la Junta de Andalucía en octubre de 2017. A la inversión inicial de 3,5 millones de euros procedentes de la ITI se suman también 655.000 euros que ha puesto el Ayuntamiento a través de una modificación de crédito que aprobó en el pasado mes de enero para hacer frente al sobrecoste de la obra.

El Museo cuenta con dos plantas y unos 1.200 metros cuadrados de superficie para zambullirse por completo en el universo de Camarón a través de una experiencia predominantemente audiovisual y un discurso emocional que pretende conmover a los visitantes.

El edificio tendrá además una estructura sumamente sencilla. El contenido se articulará en tres grandes áreas o bloques temáticos que recorrerán cronológicamente la vida de Camarón: Origen, Leyenda y Revolución.

En la planta baja, además de la recepción, de la tienda de souvenirs y de un espacio documental que permtirá la consulta de bibliografía, audiciones y visionados de manera aislada, se ubicará la primera de las áreas expositivas, la del origen. Será lo primero que el visitante se encontrará al afrontar el recorrido. Eso sí, antes verá expuesto en el patio que actúa como vestíbulo el Mercedes 300D que fue propiedad del cantaor y que va a ser restaurado. Y una proyección en una macropantalla se encargará de darle una bienvenida espectacular. Esta parte del Museo Camarón -origen- se centrará en los primeros años del artista, su vida en San Fernando, su infancia, su influencias, sus actuaciones en la Venta de Vargas.... Podrán verse también en vitrinas algunos de sus objetos pesonales, de su indumentaria, documentos, fotografías...

El recorrido continuará en la primera planta del edificio, que se repartirá entre las otras dos áreas temáticas en las que se divide el discurso expositivo: Leyenda y Revolución. La primera abarca desde la marcha de Camarón a Madrid hasta la grabación del disco La leyenda del tiempo. Será un recorrido por la etapa más ortodoxa del artista isleño, los nueve discos que grabó en los años 70 con Paco de Lucía, cuando se forja la leyenda, aunque también un periodo en el que Camarón va creando un lenguaje y unos códigos propios.

Revolución, la última área, abarca todo lo que vino después de La leyenda del tiempo. Los años 80 y los trabajos discográficos de esta década, el culto a su persona que surge tras Soy gitano. Aquí, en esta parte del museo, el visitante podrá contemplar algunos de los reconocimientos más importantes que recibió el artista y otras muestras de su legado.

Tanto en una sección como en otra el peso de la narración expositiva en torno a la figura de Camarón será audiovisual. Las proyecciones en pantallas a gran escala y la iluminación tendrán así un protagonismo especial. Actuarán de manera independiente para llevar al visitante en este viaje emocional por la vida de Camarón pero también -cada cierto tiempo- de manera conjunta para convertir la visita al Museo Camarón en toda una experiencia.